Al cumplir sus primeros 100 días de gobierno Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, insistió en que no quiere los autos procedentes de México y Canadá.
“De verdad, no queremos autos de afuera. Nosotros queremos fabricar nuestros propios autos. Esto incluye a Canadá, e incluye a México”, dijo ayer, durante el evento celebrado para la ocasión.
Trump dijo que su gobierno continúa esforzándose para que las armadoras estadounidenses regresen la producción a su país, porque ese es “un negocio de Estados Unidos”.
“Ambos países se han llevado una gran parte de nuestro negocio. Canadá se ha llevado entre el 10 y 12 por ciento y México el 32 por ciento de nuestra producción automotriz. No queremos que tengan eso. Nosotros lo queremos”, señaló.
El mandatario de los estadounidenses dijo que anunció una serie de medidas favorables para las grandes armadoras, entre las que se encuentra el ofrecimiento de créditos de hasta el 3.75% del valor total del auto, aplicable solo a los vehículos ensamblados totalmente en ese país.
Donald Trump aseguró que el armado de autos es “negocio de Estados Unidos”, acusando a México y Canadá de “robarse” una enorme parte de esta industria.