A la altura del kilómetro uno de las Curvas del Perico, fue localizado el cuerpo sin vida de un hombre, el cual se encontraba decapitado y envuelto en una cobija.

La macabra escena fue descubierta cuando su cabeza fue hallada dentro de una hielera de nieve seca, siendo posible distinguir unas botas vaqueras que pertenecían a la víctima.
La Policía Municipal recibió una llamada de alerta que condujo a su llegada al lugar, donde tras confirmar el hallazgo, procedieron a acordonar la escena del crimen para preservar las pruebas y facilitar la investigación.

Agentes ministeriales y peritos de la fiscalía se hicieron cargo del levantamiento del cuerpo y la recolección de evidencia, en un esfuerzo por esclarecer los hechos y determinar las circunstancias que llevaron a este violento suceso.