Al menos 38 personas murieron y decenas resultaron heridas por la colisión de dos trenes cerca de la ciudad de Larissa, en el norte de Grecia, en la noche del martes.
De acuerdo con la BBC, el accidente se produjo cuando un tren de pasajeros con alrededor de 350 personas a bordo chocó con un tren de carga que venía por la misma vía. Los dos primeros vagones del tren de pasajeros quedaron completamente destruidos.
La policía griega indicó que el jefe de la estación de trenes de la ciudad de Larissa fue detenido por el hecho.
Kostas Karamanlis, ministro de Infraestructura y Transporte, renunció a su cargo, diciendo en un comunicado: “Cuando ocurre algo tan trágico, es imposible continuar y pretender que no ocurrió”.