El Gobierno de Honduras identificó a dos de los muertos del incendio en la estación migratoria de Juárez e informó sobre el estado de salud de los ocho oriundos de ese país que se encuentran hospitalizados.
A la vez anunció que 11 familias ya se dirigen a México para acompañar el proceso de repatriación de sus familiares fallecidos en la estación de Ciudad Juárez del pasado 27 de marzo.
A través de un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras detalló que cuatro de sus connacionales se encuentran intubados, tres de los cuales tienen quemaduras.
De los quemados, dos han sido trasladados al Centro Nacional de Investigación y Atención a Quemados (Ceniaq) en la Ciudad de México, especificó.
Precisó que de las otras cuatro personas, uno tiene evolución favorable y los otros tres están en condiciones muy estables. Se aclaró también que estos cuatro no están intubados.
En cuanto a los reconocimientos de los hondureños presuntamente fallecidos, informó que a la Fiscalía General de la República (FGR) de México se enviaron las constancias de origen, actas de nacimiento, padrón fotográfico y registros de huellas dactilares.
“Hoy, en conjunto con los familiares, las autoridades mexicanas y hondureñas realizaron las identificaciones de José Ángel Ceballos Molina y Óscar Danilo Serrano Ramírez. Queda pendiente el resto de reconocimientos, programados a partir del 7 de abril”.
Respecto a las familias que viajaron a México, las cancillerías de Honduras y México, a través de sus consulados y embajadas, con apoyo del Instituto Nacional de Migración, lograron documentar y visar a 11 familias, las cuales salieron del aeropuerto de San Pedro Sula.
Señaló que el Gobierno de México se hará cargo de la repatriación de los connacionales fallecidos y asumirá los costos correspondientes a pasajes aéreos, hotel, alimentación y transporte de los familiares.
Finalmente, el Gobierno de Honduras solicitó al Gobierno de México “que se haga justicia y se juzgue a los actores de éste crimen, exigimos cero impunidad, comprometiéndose las autoridades mexicanas que quienes resulten responsables deberán responder ante la ley”.