El censo penitenciario del INEGI correspondiente al 2022 nos muestra el pobre avance en impartición de justicia e imposición del Estado de Derecho, con miles de personas recluidas en prisión, pero sin sentencia, y otros muchos, “lo peorcito”, como dice la canción, que aún permanecen en la calle.

Ahí están las cifras y vale la pena compararlas: Los Censos Nacionales de Sistemas Penitenciarios en los ámbitos federal y estatal (CNSIPEE-F) 2023, que el INEGI publicó este martes 18 nos indican que, en Chihuahua, ingresaron a prisión 10 mil 013 personas, en un año en el que se cometieron 68,043 delitos, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el SESNP.

Si bien es difícil hacer una comparación directa entre ambos datos, pues muchas de las personas ingresadas pudieron haber trasgredido la ley en años anteriores, pero de alguna manera da un indicador del rezago que persiste en materia de persecución del delito e impartición de justicia.

Si bien entraron más de 10 mil Personas Privadas de la Libertad, salieron 9 mil 626 reclusos y reclusas, lo que da un incremento neto de 387 residentes en alguno de los 11 centros penitenciaros del estado.

En un estado como el nuestro, donde se cometen cerca de 2 mil homicidios por año, más de 5 mil lesiones 4 mil atentados de tipo sexual y 13 mil robos, según cifras oficiales del SESNSP, la cantidad de ingresados luce realmente pálida.

Pero ese no es el único dato que muestra la degradación del Estado de Derecho en el estado y en el país, ya que aproximadamente el 40% de los habitantes de los centros penitenciarios permanecen ahí pese a que no tienen una sentencia.

De ellos, más del 50% permanecen tras las rejas gracias a la controversial figura de la prisión preventiva de oficio, cuya vigencia ha estado bajo los ojos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación e incluso de organismos internacionales.

El otro indicador que puede preocupar y debe ocupar a las autoridades de Chihuahua es la sobrepoblación, pues tienen 8 mil 967 Personas Privadas de la Libertad, y solo 8 mil 522 camas útiles. Si es así ¿dónde caben los otros 445 internos e internas?

En un mundo ideal preferiríamos que no ingresara nadie porque no se registró ni un solo delito, pero eso no es posible, así que se requiere más inversión en ese rubro, aun cuando ya se gastan cerca de mil millones de pesos en prisiones.

PD: Por cierto, pese a la intensa actividad de grupos delictivos en el estado, no hay un solo reclusorio de jurisdicción federal. Los 11 existentes son estatales y corren por cuenta del presupuesto local. Hasta en eso hay inequidad fiscal.

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Cuando anunciaron la gira de la aspirante presidencial Claudia Sheinbaum, los activistas de Morena que promueven su—como se llame, precandidatura o algo así—coincidieron en advertir que el proyecto de seguridad pública que enarbola su representada no se basa en la vigilancia ni en la fuerza, sino en el desarrollo social.

Dicho de otra manera: es más o menos lo mismo que los “abrazos y no balazos” que ha sostenido el presidente AMLO en sus casi cinco años de ejercicio, política que ha sido uno de los principales focos de controversia hacia su administración y que ha valido críticas, incluso, de actores de la iglesia católica.

¿Se acuerdan del discurso del padre Javier “Pato” Ávila durante la misa de cuerpo presente de los sacerdotes jesuitas asesinados en Cerocahui?

El grupo que promueve a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, actualmente con licencia, advirtió que el proyecto de seguridad pública se basará en el desarrollo social.

El exdiputado y exfuncionario del gobierno de Javier Corral calificó de “masculinista” la propuesta de la administración actual de Chihuahua, basado en la Plataforma Centinela, e incluso del otro “corcholato” morenista, Marcelo Ebrard, ambos sustentados en la vigilancia sobre los ciudadanos.

Ante el cuestionamiento de los medios, la diputada local María Antonieta Pérez Reyes comentó que se requieren al menos 30 años de trabajo continuo para lograr niveles de desarrollo social con los que se puede reducir los índices delictivos.

La otra, dicen, es hacer uso de la fuerza, como ya pasó en los sexenios recientes.

Habrá quien diga que es mejor continuar con la política de desarrollo vs delito, algo parecido a los “abrazos, no balazos”. Otros, los más acérrimos críticos de la 4T y los no tan opuestos ya piden acciones policiales e incluso militares más determinadas para contener a los cárteles delictivos e imponer el orden en las calles.

Los morenistas aseguran que, con las medidas que aplicó Sheinbaum en la Ciudad de México, los índices delictivos bajaron en más de un 40%.

El detalle es que, durante la actual administración, ya se superó el total de homicidios dolosos cometidos en el anterior sexenio e incluso que el antepasado, el de la “guerra de Calderón”, y eso que aún le falta un año y meses de vigencia.

A ver cómo les va cuando presenten a su aspirante con la bandera del desarrollo en vez de la fuerza. Al menos ya la cantó por adelantado y nadie se puede decir sorprendido.

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A los diputados encargados de hacer el análisis de la reforma a la Ley de Pensiones Civiles del Estado y de su reglamento médico se les está haciendo bolas el engrudo.

Tal parece que no han entendido o no quieren entender que los fallos emitidos por jueces federales obligan a hacer una reforma a fondo donde tanto hombres como mujeres al servicio del Gobierno del Estado o sus organismos descentralizados y autónomos tienen idénticos derechos.

En ese sentido, tanto el empleado como la empleada pueden registrar como derechohabientes del PCE a sus cónyuges, pues tienen idénticos derechos, según lo establece el texto constitucional del país.

Sin embargo, el diputado Mario Rodríguez, del PAN, encargado de la llamada “Comisión Especial” para el análisis de la reforma a la Ley de Pensiones Civiles del Estado parece que no lo ha entendido así.

En conferencia de prensa, preguntado sobre el tema, respondió que aún “están viendo” lo que deben hacer en torno a la inscripción de los esposos de las trabajadoras.

Hasta la fecha, y a semanas de integrada esa “Comisión Especial”, el legislador no traía a la mano los datos ni de cuántos esposos de trabajadoras estatales ya reciben los servicios del IPC, ni cuanto le costará a la institución ampliar su base de derechohabientes en esas proporciones.

Aquí le ayudamos tantito: son 8 mil los “esposos” ya atendidos en PCE, pero lo hacen gracias al amparo que promovieron sus esposas y no por buena voluntad del organismo mencionado.

Aunque no se han dado a conocer cifras oficiales, la anterior administración estimó que harían falta entre mil y mil 500 millones de pesos adicionales para atender a los más de mil 500 maridos de un igual número de mujeres derechohabientes.

A la fecha, PCE tiene 90 mil 750 derechohabientes, de los cuales más de la mitad se encuentran en la ciudad de Chihuahua.

Háganle sumas y restas y agréguenle otros mil 500, luego, arrastren el lápiz y vean a ver de dónde le recortan o a dónde le suben para empatar el presupuesto, porque así como está Pensiones, difícilmente va a aguantar esa nueva carga.

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Las dos aspirantes a la Presidencia de la República que puntean las encuestas de preferencias en sus respectivos frentes partidistas, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, estarán en el estado de Chihuahua en el tramo final de la semana que está en curso.

Cada una de ellas estará “jugando de local”, como quien dice, pues visitarán ciudades donde gobiernan las fuerzas que las empujan hacia la Presidencia y donde predomina la corriente ideológica a la que representan.

Primero llegará Xóchitl, y será el jueves 20 de julio cuando dé una conferencia a partir de las 17:00 horas, cinco de la tarde, en el marco del ciclo “Diálogos por la democracia” que organiza el sindicato patronal Coparmex Chihuahua, el Consejo Coordinador Empresarial y el CEPAC.

Antes ofrecerá una conferencia de prensa de 45 minutos—así lo indicaron los convocantes, la Coparmex—y luego se reunirá con la gobernadora Maru Campos Galván.

O sea, panismo puro. Estará con los de casa, pues, en una ciudad ampliamente dominada por el partido más identificado con el conservadurismo mexicano, como es el PAN, el cual tiene la Presidencia Municipal, los cinco distritos locales, los dos federales y de pilón la sindicatura.

Claudia Sheinbaum, en cambio, visitará Juárez el próximo sábado 22. Llega a una ciudad fronteriza gobernada por Morena a plenitud, con un alcalde como Cruz Pérez Cuéllar, de pasado panista relativamente cercano, pero que ha mostrado ser una pieza leal a la 4T.

Si bien Pérez Cuéllar no se ha “descarado” por alguna de las corcholatas en disputa, sí le ha sonreído al activo movimiento “claudista” que campea en Ciudad Juárez.

Nada más hay que ver gran parte de la bancada morenista en el Congreso está en el frente de batalla con Sheinbuam: Leticia Ortega; Antonieta Pérez Reyes y Cuauhtémoc Estrada, juarenses hasta la médula.

La “corcholata” que aparece como puntera en todas las encuestas disponibles para el público tendrá un lugar a modo dónde visitar al estado, después de la fría recepción que tuvo en la ciudad de Chihuahua en mayo pasado.

Queda pendiente ver cómo les va a cada una, pero de visitantes, es decir, cuando Xóchitl visite Juárez y Claudia Chihuahua. Eso, claro, si se quedan con la postulación del frente Va por México y de Morena y aliados, respectivamente.