La organización Guacamaya Leaks reveló que en abril del año pasado la Fiscalía General del Estado había lanzado un llamado de auxilio a la Guardia Nacional para trasladar a penales federales a reos peligrosos de 8 asociaciones criminales en los que figuraban “El Neto” y “El 300”.
El llamado “extra urgente” consta en tres oficios enviados en abril por el entonces responsable del sistema penitenciario estatal, Luis Alfonso Harris.
En los oficios enviados el 1, 6, y el 8 de abril de 2022 se expresaba la urgencia la urgencia del traslado de un total de 300 reos de alta peligrosidad correspondientes a ocho organizaciones criminales generadoras de violencia tanto al interior como al exterior del Cereso 3 de Ciudad Juárez.
Los documentos de la fuente clandestina que penetró los archivos del Ejército reveló también que la presencia de los cárteles de Juárez y Sinaloa representan un problema de gobernabilidad en la entidad y es motivo de preocupación nacional.
Sin embargo, la revelación de la falta de atención en esta solicitud de la Fiscalía General de Chihuahua pone en evidencia que el pasado motín que derivó en la muerte de reos y custodios pudo haberse evitado.
Entre las organizaciones detectadas al interior del Cereso 3 generadores de violencia están los carteles de Sinaloa, La Empresa, Los Aztecas, Los Mexicles, La Línea, Los Paisas, Los sureños y Los Artistas Asesinos.