Las autoridades federales de Los Ángeles, California, ofrecen una recompensa de 20 mil dólares para encontrar a una ciudadana estadounidense que, afirman, fue secuestrada en México el mes pasado.
María del Carmen López, de 63 años, fue sustraída de su casa en Pueblo Nuevo, Colima, México, el 9 de febrero, señaló la oficina del Buró Federal de Investigaciones (FBI) en Los Ángeles, en un comunicado emitido ayer.
López es descrita como hispana, con cabello rubio y ojos marrones; mide 1.57 metros y pesaba alrededor de 72.5 kilos cuando fue vista por última vez. También se menciona que tiene los ojos maquillados permanentemente con delineador tatuado.
Sonia López, hija de la mujer, dijo a NBC4 que su madre viajaba entre Los Ángeles y México. En el momento del presunto secuestro, su madre estaba sola en suelo mexicano porque su esposo visitaba a un médico en Los Ángeles.
Se solicita a cualquier persona que tenga información que se comunique con su oficina local del FBI o la embajada o consulado estadounidense más cercano. Se puede comunicar con la división de Los Ángeles del FBI al 310-477-6565 y a través de la página tips.fbi.gov.
El 3 de marzo, cuatro estadounidenses fueron secuestrados en Matamoros, Tamaulipas; dos de ellos murieron a manos de sus captores, presuntos narcotraficantes. Desde entonces los reclamos de Washington a México han subido de tono por el problema de la inseguridad.
En tanto, la fiscalía de Colima informó que no tiene denuncia sobre el secuestro de María del Carmen López.
El área de prensa de la dependencia indicó que es la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada de la Fiscalía General de la República la que lleva las indagatorias del caso.
Según información de la oficina del FBI en Los Ángeles, María del Carmen López, de 63 años, fue sacada de su casa en Pueblo Nuevo, Colima, el pasado 9 de febrero.
Por otra parte, el senador demócrata Bob Menéndez aseguró en entrevista con el canal MSNBC que “no dejaría” a su hijo viajar a nuestro país en esta temporada de spring break, a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador afirma que México es “más seguro” que Estados Unidos.