Diagnósticos contradictorios son lo que dieron los dos médicos que se presentaron a declarar a la audiencia intermedia del juicio que se le sigue al exmandatario César D.J. donde, entre otros aspectos, la defensa pedía el retiro de la medida cautelar por motivos de salud.
Mientras que la declaración del médico Mario Alberto Valles dice que el inculpado había sufrido un microinfarto el viernes pasado, el otro galeno que lo revisó, Mario Alberto Valles, negó tal suceso.
Al exponerse la declaración del doctor Valles, se afirmó que, mediante un ecocardiograma, se pudo confirmar que se había presentado un infarto cuando el imputado dormía.
Sin embargo, Holguín Pérez recalcó que los estudios reflejaban que no se cumplía con lo que se requiere para determinar que se tuvo un infarto.
Ante esto, el equipo de defensa del político ballezano señaló que el testigo se estaba adelantando a las preguntas, por lo que pusieron en tela de juicio las respuestas, alegando que el médico estaba aleccionado para que diera las respuestas.
“Yo aquí vine a dar mi respuesta como profesionista”, dijo el médico Holguín Pérez.
Al ser cuestionado respecto a la posibilidad de que el exmandatario tuviera un infarto según los estudios, respondió que tras un accidente de ese tipo no podría tener la movilidad que mostraba en el juicio.
Sin embargo, Holguín Pérez señaló que para esto se tiene que llevar a cabo otros estudios previos, cosa que le sugirió a su médico para que se apoyara de otras formas de mostrar.
Otro de los puntos que el médico tocó fue la recomendación a su galeno de que baje de peso, esto al ser cuestionado por la obesidad del imputado.
Dentro de la declaración del médico la juez llamó al orden debido a que la defensa, esto ya que el cuerpo de abogados defensores generaba interrupciones dentro de la declaración.
La defensa del procesado difundió el viernes la noticia de que su representado había sufrido un infarto y que este se debía a las condiciones de estrés a las que estaba sometido al permanecer recluido en una prisión.
Desde el inicio del proceso en su contra, D.J., ha sostenido que padece alta presión y que tiene, además, diversas secuelas del accidente de helicóptero que sufrió en el año 2015.
