Al despuntar el alba de hacen 58 años (en 1965), al cuarto para la seis, el profesor Arturo Gámiz García al mando de maestros, estudiantes y campesinos rurales perpetraron una temeraria acción guerrillera, el Ataque al Cuartel de Madera, que daría pie al surgimiento de la Liga 23 de Septiembre.
El despojo de caciques de la región noroeste de Chihuahua nutrió la participación del grupo, entre ellos, jóvenes ansiosos por el cambio para dar cuerpo a la protesta social en la región, nutrida con ejidatarios madereros explotados por Bosques de Chihuahua, profesionistas y estudiantes bajo la dirección del mismo Gámiz García.
La acción armada constituyó una réplica del asalto al cuartel Moncada en Cuba, llevada a cabo por un comando armado dirigido por Fidel Castro y El Ché Guevara 12 años antes, el 26 de julio de 1953 y que marcó el inició de la Revolución Cubana.
Gámiz y Pablo Gómez Ramírez, médico y profesor de la Escuela Normal Rural Ricardo Flores Magón de Saucillo, ordenaron atacar el cuartel donde estaban acuartelados más de 100 soldados.
El sorpresivo ataque ocasionó bajas en el Ejército, que de inmediato repelió la agresión provocando la muerte de ocho guerrilleros, cuando, superados en número, huían por la planicie para internarse en los bosques.
En la breve batalla murieron Arturo Gámiz García, profesor rural y principal dirigente de la guerrilla; Pablo Gómez Ramírez, médico y profesor de la Escuela Normal Rural Ricardo Flores Magón de Saucillo; Emilio Gámiz García, estudiante y hermano de Arturo; Antonio Scobell, campesino y Oscar Sandoval Salinas, estudiante de la Escuela Normal del Estado.
Entre las bajas también se encontraban Miguel Quiñones Pedroza, profesor rural y egresado de la Escuela Normal Rural Abraham González de Salaices (Municipio de López); Rafael Martínez Valdivia, profesor rural en el poblado de Basúchil, Chihuahua y Salomón Gaytán, campesino de Dolores, Municipio de Madera.
La suerte dejó con vida a cinco guerrilleros: Ramón Mendoza, Guadalupe Scobell Gaytan, Florencio Lugo, Francisco Ornelas Gómez y Juan Fernández Adame. En la refriega también hubo seis soldados muertos y 10 heridos.
Los cuerpos de Gámiz y sus guerrilleros fueron recogidos por los soldados y paseados por la ciudad en un camión, como escarmiento; luego, los familiares los colocaron en unas bolsas negras, para llevarlos a la ciudad de Chihuahua.
El gobernador Práxedes Giner Durán, que se había trasladado a Madera, ordenó que se abriera una fosa común y ahí se enterraran y soltó una frase lapidaria: “Era tierra por lo que peleaban, ¿no? ¡Pues denles tierra hasta que se harten”!
Los soldados, en contraste, recibieron sepultura con honores y funeral militar, además fueron bendecidos por el cura de la comunidad, Roberto Rodríguez Piña quien se negó a hacer lo mismo con los cuerpos de los guerrilleros.
Ocho años más tarde, el 15 de marzo de 1973 en Guadalajara se funda la Liga Comunista 23 de Septiembre, para unificar a todas las organizaciones del momento y construir una fuerza política con dirección hacia la lucha armada y la guerra de guerrillas.