Alcaldes y organizaciones defensoras de migrantes han señalado que reciben presiones de autoridades federales como Migración y la Guardia Nacional para que dejen de apoyar a las personas en situación de movilidad.
El alcalde de Jiménez, Marcos Chávez Torres, lamentó que las autoridades federales le reprochen el apoyo que su administración proporciona a los grupos migrantes.
“He tenido algunas situaciones lamentables con Guardia Nacional y Migración, que me reprochan que apoye a las personas migrantes; me dicen que deje de ayudarles, que si he de apoyar que sea para que se regresen a sus países de origen”, lamentó el edil.
Chávez Torres refirió que justo después de la reunión que autoridades estadounidenses tuvieron con sus homónimos de México para estudiar el fenómeno migratorio, el flujo de personas en movilidad se detuvo dramáticamente.
“El último grupo grande que atendimos fue el de unas mil 500 personas que habían quedado varadas en el ferrocarril el pasado 26 de diciembre y que tuvimos que asistir porque se nos estaban congelando”, lamentó.
Resaltó que esperaban un gran grupo procedente de Coahuila y Durango, pero tras la referida reunión binacional el flujo se redujo a pequeños grupos que muy pronto son dispersados por elementos de la Secretaría de Gobernación y Guardia Nacional.
“Yo aquí seguiré apoyando a quien lo necesite, con alimentos y con los albergues que habilitamos en gimnasios y otros espacios, porque ante todo somos humanos y tenemos qué ver por nuestros semejantes”, dijo el edil.