bar

La Unidad de Investigación contra el Narcomenudeo de la Fiscalía de Distrito Zona Centro, obtuvo un auto de vinculación a proceso, dictado en contra de los imputados César Manuel C. C., Kevin Jesús M. D., por los delitos de portación de arma de fuego de uso exclusivo y posesión simple de narcóticos, asimismo, en contra de Irvin Avisai R. V., por posesión simple de narcótico.

A través de un comunicado de prensa se informó que el juez de Control del Distrito Judicial Morelos conocedor de la causa penal 2938/2024, consideró suficientes los datos de prueba que expuso el agente del Ministerio Público para acreditar la posible responsabilidad de los imputados.

Se indicó que la detención de los tres imputados se registró el 30 de julio de 2024, aproximadamente a las 17:48 horas, en las inmediaciones de la calle Puerta Maschio de la colonia Puerta Sabona II en la ciudad de Chihuahua, cuando estaban en un vehículo marca Chevrolet línea Blazer, de color blanco.

Al imputado Kevin Jesús M., D., le aseguraron un arma de fuego calibre 9mm, con su cargador abastecido, así como 104.48 gramos de cannabis; al imputado César Manuel C. C., un arma de fuego calibre 9mm con su cargador abastecido y 103.42 gramos de cannabis, y a Irvin Avisai R. V., 107.39 gramos del citado enervante.

Las armas de fuego aseguradas dieron positivo en las pruebas de balística a las disparadas en hechos ocurridos al exterior del bar Juana Gallo en los que fallecieron tres personas y otras tres resultaron lesionadas, se dio a conocer.

Ayer martes se resolvió su situación jurídica de César Manuel C. C., Kevin Jesús M. D., e Irvin Avisai R. V., por lo que refiere a los delitos de portación de arma de fuego y posesión simple de narcóticos.

Mañana jueves 8 de agosto, se efectuará la audiencia de vinculación o no a proceso penal referente a los delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa, refiere el comunicado.

(mr)

Cuatro presuntos implicados en una masacre registrada al interior de la “Cantina tradicional VAI-VEN”, ubicada en la colonia Concordia, fueron vinculados a proceso, informó esta tarde la Fiscalía de Distrito Zona Centro.

Los vinculados son Javier A. A., Jorge Alberto B. M., Brandon Rafael S. R., y José Arnulfo C. C., por el delito de homicidio calificado, cometido el pasado 6 de octubre, en el citado bar, en la ciudad de Chihuahua.

Agentes del Ministerio Público de la Unidad de Delitos contra la Vida, expusieron datos de prueba que establecen que ese día, aproximadamente a las 20:20 horas, los imputados realizaron labores de acecho y vigilancia de las víctimas en el establecimiento denominado “Cantina tradicional VAI-VEN”, se indicó.

De las investigaciones se desprendió que el imputado José Arnulfo C. C., fue el primero que ingresó al lugar y que minutos después alrededor de las 20:50 horas, arribaron a bordo de un vehículo de la marca Nissan, y de una camioneta tipo Jeep, Cherokee, Javier A. A., Jorge Alberto B. M., y Brandon Rafael S. R., en compañía de diversos sujetos aún sin identificar, se mencionó.

Que una vez en el interior del bar, realizaron múltiples disparos de armas de fuego en contra de las víctimas para posteriormente huir a bordo de los vehículos mencionados, añade el reporte oficial.

En el lugar perdieron la vida a consecuencia de heridas provocadas por disparos de arma de fuego tres víctimas identificadas como Cristian Rubén G. O., Iván Alan C. F., y Edgar Arturo P. F., mientras que una cuarta víctima de nombre Enrique Luis C. R., falleció cuando recibía atención médica en el hospital del IMSS Morelos, agrega el comunicado.

La detención de los imputados fue dentro del término de la flagrancia, durante un operativo implementado por elementos de la Agencia Estatal de Investigación en coordinación con elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, se informó.

Una vez puestos a disposición del Ministerio Público, fueron llevados a la audiencia de formulación de imputación y ahora, la representación social acreditó ante el Juez de Control conocedor de la causa penal su posible participación en los hechos imputados, por el cual quedaron sujetos a un proceso penal bajo la medida cautelar de prisión preventiva, puntualiza el informe difundido.

Con los ojos hinchados por las lágrimas y cubriéndose el rostro Aritzi, las dos mujeres llamadas Ana Karen y Cecilia escucharon en la burbuja de seguridad de la sala 10 de los juzgados de control de Barrientos la determinación de la juez de vincularlas a proceso a ellas y a Eduardo y Carlos, por el homicidio del empresario Iñigo Arenas Saiz, quien murió dentro del bar “Black Royce”.

La preocupación de las jóvenes al quedar vinculadas a proceso y por ende recluidas en el penal de Barrientos, además de perder su libertad son sus hijos, pues prácticamente todas son madres de familia que trabajaban para mantener a sus pequeños, señalaron familiares y especialmente las abuelas que asistieron a la audiencia.

A sus 24 años, una de las detenidas tiene una bebé que está por cumplir un año y una niña de 7 años, que ahora quedarán bajo el cuidado de su abuela, quien también tiene que trabajar para sobrevivir.

¿Qué papel cumplió cada empleado del “Black Royce” en la muerte de Iñigo Arenas?

El argumento de la juez y del Ministerio Público, fue que cada uno de los seis empleados del bar “Black Royce” cumplió un papel específico para retener y seguir dando de beber al cliente el que manifestó en varias ocasiones que se quería ir porque tenía mucho sueño, sin embargo para que se le bajara la embriaguez, una de ellas puso un polvo verde en el vaso con agua de Iñigo, “que es una droga que utilizan para bajar la borrachera”, señaló en su declaración Ricardo, gerente del bar quien de detenido pasó a ser testigo.

En la audiencia de vinculación a proceso que se prolongó por 16 horas, la juez describió la forma en que ellas ofrecieron su compañía a Iñigo dos de ellas con vestidos de color negro, otra en rojo y una más en lencería blanca, quienes de forma inicial consumieron “4 rondas de caballitos de tequila”, en la mesa del “Black Royce”.

Sin embargo, al pasar a una sala VIP, el servicio implicaba que por cada una de las mujeres de compañía, el cliente tenía que pagar una botella, por ello la cajera del lugar le aplicó el cobro de 40 mil pesos, en la tarjeta bancaria de Iñigo Arenas, por el consumo de cuatro botellas de champaña Moet Chandon y Pata Negra.

El papel de las cuatro mujeres, relató la juez, atender y mantener alerta al cliente con el que bebieron, le bailaron y estuvieron en un salón VIP a oscuras, hasta que una de ellas encendió una luz y se percató que tenía los dedos y los labios morados, por lo que dieron aviso al jefe de meseros del bar.

Las cuatro jóvenes en el inicio de la audiencia salieron optimistas y saludaron con señas a sus madres, hermanos y padres que asistieron a la sala 10 de los juzgados de Barrientos, hasta donde se escuchaban los gritos de sus compañeras que se manifestaban en la calle diciéndoles “¡No están solas!”, “¡Justicia!” y “Libertad”.

No obstante, su ánimo decayó cuando después de las 10 de la noche escucharon los argumentos de la jueza, que se prolongaron por tres horas, para vincularlas a proceso, momento en el que rompieron en llanto y sus peinados de chongo alto con los que iniciaron para ese entonces también estaban deshechos, al enterarse que permanecerán en prisión por varios meses mientras dura el proceso penal, en el que se determinará si son o no culpables del homicidio del empresario de 41 años.

Agentes de la Fiscalía capitalina investiga la muerte de una joven que salió de un antro de la Zona Rosa y minutos más tarde murió, si bien paramédicos determinaron que posiblemente la causa de muerte fue una “congestión alcohólica”, ahora su familiares y amigos exigen justicia y que el caso se esclarezca.

Las primeras versiones policiacas indican que la joven salió la noche del domingo de un bar en el sector antes mencionado, luego se fue a casa de una amiga en calles de la colonia Azcapotzalco cuando de repente -según testimonio de sus amigos- Jaqueline, empezó a sacar “espuma de la boca” y aunque paramédicos llegaron a tiempo e intentaron reanimarla, nada pudieron hacer por ella.

Iñigo Arenas desapareció tras salir de bar en Polanco; apareció muerto en otro de Naucalpan

Un caso similar se registró hace unos días. Se trata del empresario Iñigo Arenas Saiz, quien desapareció tras salir de un exclusivo bar de Polanco y luego hallado muerto en otro de Naucalpan, en el Estado de México.

El Consejo Ciudadano pidió ayuda para localizar a Iñigo Arenas Saiz, quien fue visto por última vez la madrugada del domingo saliendo de un antro ubicado en Polanco.
En su conferencia mañanera del lunes 7 de agosto en Palacio Nacional, López Obrador informó que el empresario había sido localizado sin vida. Momentos después se supo que su cuerpo se encontraba en un restaurante-bar de Naucalpan.

Iñigo había intentado regresar al bar República de la CDMX, sin embargo, por el estado etílico que presuntamente se encontraba, no le permitieron el acceso.

Su cuerpo fue hallado en un bar de Naucalpan de nombre “Black Royce”, donde la Fiscalía del Estado de México realizó este martes un cateo para buscar más indicios que lleven a esclarecer por qué murió el empresario.

De acuerdo con fuentes de la Fiscalía mexiquense, el cuerpo de Arenas Saiz no presentaba huellas de violencia.