Durante la gira de trabajo de la gobernadora María Eugenia Campos Galván en la comunidad de Cerocahui, municipio de Urique, el fiscal general César Jauregui afirmó que en la zona se vive en paz y que los índices de violencia bajaron significativamente.
El funcionario dijo que antes de que el mismo crimen organizado matara a “El Chueco”, las corporaciones de seguridad habían detenido a cerca de 40 miembros de su organización, los cuales todos se encuentran apresados, y procesados por diversos delitos.
Agregó que desde antes del asesinato de los jesuitas, el 20 de junio del 2022, la fiscalía, la Sedena y la Guardia Nacional trabajaban para capturar a los criminales de la zona, aunque no había una permanencia de las corporaciones en el lugar.
Agregó que adicionalmente a las tareas de seguridad, se han llevado servicios de desarrollo social y apoyos alimentarios para atacar las causas de la violencia en la región.
“Es un hecho que la Guardia Nacional estará destacamentada aquí y la seguridad está en manos de la SSPE y la FGE”, comentó.
Dijo que el crimen organizado está obteniendo más dividendos por la tala del bosque, la venta de alcohol y el tráfico de personas, aún más que el trasiego y venta de drogas.
“Solo en zonas como Juárez el tráfico de personas representa una ganancia de 100 millones de dólares de manera mensual”, comentó el funcionario.
Finalmente, el fiscal indicó que se tiene una estrategia puntual para atacar estás problemáticas, y que la tala ilegal, aunque sea un delito federal, el gobierno estatal apoya con las tareas de combate a este delito y los subyacentes.