La Fiscalía General del Estado de Chihuahua brinda seguimiento puntual a las medidas cautelares emitidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en favor de integrantes de la comunidad jesuita de Cerocahui.
El propio fiscal general César Jáuregui había expresado su disposición de cumplir a cabalidad los requerimientos de protección de la comunidad religiosa asolada por la violencia.
Por tal razón la Fiscalía Especializada en Investigación de Violaciones a los Derechos Humanos, Fiscalía de Distrito Zona Occidente y de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, se han sostenido reuniones con la Secretaría de Gobernación (Segob) a fin de atender lo indicado por el órgano.
En virtud de que el objetivo es proteger a los miembros de la comunidad, garantizar su seguridad en las labores que realizan, se acordó efectuar un análisis de riesgo, respecto al contexto del lugar donde llevan a cabo sus actividades.
Asimismo, mediante la Segob se busca tener un encuentro con los beneficiarios, sus representantes y las autoridades para concertar las medidas que les permitan continuar con las labores que vienen desempeñando, ya que es lo que se busca que como beneficiarios acepten y a principalmente, que estén de acuerdo con la actividad de la autoridad, se dijo a través de un comunicado.
Aunado a ello, la Fiscalía General del Estado aseguró que ha mantenido operativos de seguridad en el municipio de Urique, mediante patrullajes, recorridos e instalación estratégica de puntos de revisión.
Dicha acción se suma a los trabajos de inteligencia policial, que lleven a la captura del generador de violencia, José Noriel Portillo Gil alias “El Chueco” y de quienes pertenecen a su grupo delincuencial.
Se destacó que las tareas conjuntas son permanentes y a la fecha se ha logrado la detención de 30 personas ligadas a esa estructura criminal.