En el marco del Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura este 26 de junio, se presentó la Estrategia Nacional contra la Tortura para difundir material para visibilizar y prevenir este delito y los malos tratos, mediante menajes conjuntos a la población.
La campaña, del 26 al 30 de junio, también prevé que las autoridades que integran esta estrategia publiquen y compartan contenidos visuales a través de páginas oficiales, redes sociales, al interior de las instituciones y en espacios de impacto social e interés público.
¿En qué consiste?
Con la participación de 18 dependencias del Gobierno de México, la estrategia plantea diversas líneas generales como el diseño de esquemas de capacitación dirigidos a servidores públicos respecto a la aplicación de los Principios de Méndez; implementa y fortalece mecanismos de protección para servidores públicos que presenten denuncias por hechos de tortura; impulsa la elaboración de diagnósticos para detecta necesidades de capacitación, formación y profesionalización para prevenir el delito.
Además de atender, cumplir quejas, recomendaciones y solicitudes de organismos públicos de derechos humanos y organismos internacionales; implementar campañas de sensibilización dirigidas a servidores públicos para consolidar la cultura de cero tolerancia de actos de tortura; informa a la sociedad con campañas sobre el procedimiento y mecanismo de denuncia; promueve la difusión de recomendaciones, opiniones, dictámenes, sentencias e instrumentos de organismos nacionales e internacionales.
También promueve que los servidores públicos se abstengan de realizar expresiones públicas que deslegitimen, criminalicen y revictimicen a las víctimas.
La Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional con la impartición de capacitación en el uso legítimo de la fuerza y prevención de la tortura; integrar en todos los casos de privación de la libertad, la información en el Registro Nacional de Detenciones; y promover el uso de medios electrónicos para monitorear las detenciones y los traslados para evitar tortura.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, así como el Programa de Prevención y Readaptación Social para establecer y mantener mecanismos para la recepción de denuncias al interior de los lugares de la privación de la libertad; garantizar que los centros penitenciarios cuenten con personal médico especializado y protocolos con perspectiva de género para realizar exámenes; y supervisar espacios de privación de la libertad.