Arqueólogos han hecho un descubrimiento sorprendente en el sur de Alemania, donde aseguran haber encontrado lo que podría ser la fosa común más grande jamás excavada en Europa., informó CNN.
Según un comunicado de prensa publicado el martes, alrededor de 1.000 esqueletos de víctimas de la peste han sido desenterrados hasta ahora en fosas comunes en el centro de la ciudad de Nuremberg, y se estima que podría haber más de 1.500 personas en total.
De acuerdo con la información, estos restos fueron descubiertos durante un estudio arqueológico previo a la construcción de nuevos edificios residenciales en la ciudad. Melanie Langbein, del departamento de conservación del patrimonio de Nuremberg, explicó a CNN que se identificaron ocho espacios, cada uno de los cuales contenía varios cientos de cadáveres.
“Estas personas no fueron enterradas en un cementerio normal, aunque en Nuremberg hemos designado cementerios para la peste”, afirmó Langbein.
Esto significa una gran cantidad de muertos que necesitaban ser enterrados en un corto período de tiempo sin tener en cuenta las prácticas cristianas de entierro, se explicó.
El descubrimiento arroja luz sobre el impacto devastador que la peste tuvo en Europa durante la Edad Media y demuestra la magnitud de la tragedia vivida en Nuremberg y en toda la región.
Los arqueólogos continúan trabajando para investigar y comprender plenamente la importancia histórica y científica de este hallazgo único en su tipo.