En un hecho que redefine el mapa político del Medio Oriente, Estados Unidos, Egipto, Catar y Turquía firmaron este domingo una declaración conjunta para garantizar el fin de la guerra en Gaza y el cumplimiento del alto al fuego permanente entre Israel y Hamás.
La firma se llevó a cabo durante la cumbre Paz en el Medio Oriente, celebrada en la ciudad egipcia de Sharm el-Sheij, con la presencia del presidente estadounidense Donald Trump, quien aseguró que el pacto “se va a cumplir” y que representa “una nueva etapa de estabilidad regional”.
El documento —descrito como una declaración de cumplimiento obligatorio— establece mecanismos de verificación internacional, compromisos humanitarios y un proceso de reconstrucción de la Franja de Gaza bajo supervisión multilateral.
Uno de los puntos más sensibles del acuerdo fue el intercambio de 20 rehenes israelíes vivos por mil 968 prisioneros palestinos, medida considerada por observadores como una señal de apertura y voluntad de ambas partes.
Egipto y Catar encabezarán las tareas de mediación y monitoreo del alto al fuego, mientras Turquía se comprometió a enviar personal técnico y ayuda humanitaria para la reconstrucción del enclave.
Expertos en política internacional destacaron que el pacto, más allá de detener los bombardeos, reconfigura las alianzas diplomáticas en la región, en un momento donde el papel de Estados Unidos como mediador había sido cuestionado.
“No hay vencedores, solo sobrevivientes”, expresó uno de los delegados palestinos presentes en la ceremonia, recordando que la paz, en Medio Oriente, siempre tiene un costo.
