Esta semana circuló un documento presuntamente oficial donde los partidos de la 4T definían el reparto de los estados donde llevarían la primera fórmula al Senado de la República y, de ser auténtico, Chihuahua daría la sorpresa.

Según se aprecia en la plantilla de candidaturas, la de Chihuahua sería reservada para el Partido Verde Ecologista de México, algo que sonaba totalmente traído de los cabellos, habida cuenta de la intensa campaña que se trae la militancia de Morena por esas postulaciones.

Sin embargo, voces desde adentro del partido guinda nos confirmaron el dato: sí irá para el Verde, pero con un “morenista” descolorido al que fácilmente pueden ponerle el color del partido del tucán.

Se trata, nos aseguran, el senador suplente Rafael Espino de la Peña quien, a juicio de muchos, era el que menos probabilidades tenía de repetir, por sus reiteradas posturas en contra de las propuestas de su partido.

Nos comentan que es una “jugada maestra” de Ariadna Montiel Reyes, la “mánager” de una parte del morenismo chihuahuense, quien no encontraba manera de quitar de la lista a su “ex amigo” Juan Carlos Loera de la Rosa, el súper delegado del Bienestar.

Como sea que quede el acomodo, cuesta trabajo creer que Morena le cederá la candidatura “premier” a un partido como el PVEM que ni siquiera tiene registro en el estado, pues logró una mísera porción de votos en la pasada elección local.

Es más, ni siquiera aparece en las encuestas como referencia sobre preferencias de voto por partido.

A nivel nacional, casi todas las encuestas le otorgan entre el 2 y el 3% de la intención de voto, pero si le hacemos caso al mentado documento, el frente 4T le estaría reservando cinco candidaturas de primera fórmula: Querétaro, San Luis Potosí, donde gobierna actualmente; Sinaloa, Yucatán y el ya mencionado Chihuahua.

A ver si les entendemos: ¿le dan el 15.6% de los escaños “amarrados” a un partido que tiene el 3% de la votación? Están raros esos enjuagues, la verdad.

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Desde la torre que conocemos como “Ciudad Judicial” nos llega la versión de que el reparto de magistraturas ya está más planchado que un pantalón enviado a la tintorería y que todo quedará como se ha manejado hasta el momento.

Tal como lo advirtió esta argüendera Doña, las salas se quedarán cual vil reparto entre partidos, con cuotas para los “cuates” y no necesariamente para las fuerzas políticas, en función de su peso electoral.

Así, el PT, que ya se quedó sin diputado local—por primera vez en este siglo—tras la renuncia de Jael Argüelles, sí le alcanza para amarrar la Sala Civil y Familiar para Julio César Merino, el amigo de Lilly Aguilar.

Lo de María Ávila Serna, dirigente de Movimiento Ciudadano en Chihuahua, va en serio, como diría Ripley: “aunque usted no lo crea”. Va para la Segunda Sala Civil Bravos (Juárez), una de las más disputadas, donde se han inscrito otras cinco aspirantes, todas ellas “externas” al TSJ, según los términos de la Convocatoria.

El PRI, así empequeñecido y todo, como está, se llevará la Octava Sala Civil del distrito Morelos (Chihuahua), en la persona de su ex dirigente municipal, Fernando Mendoza Jáquez. Eso, pese a que hay otros 16 aspirantes.

A todo esto ¿hay algún “kórima magistratura” para Morena, la segunda fuerza electoral y primera mayoría en el Congreso? Ni pensarlo, nos dicen, porque además no le van a entrar al “reparto” y están impugnando la convocatoria ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Lo que no cuentan los dueños de la planchaduría es que muchas de las 95 personas que se inscribieron para contender por una magistratura lo hicieron a sabiendas de que no iban a ganar, pero sí podrán ampararse contra la convocatoria y echarla pa’abajo.

Y ahí sí que amparo mata planchado.

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Nos adelantan que el PRI irá solo en las elecciones federales del año próximo en el municipio de Chihuahua, y en una de esas, en el distrito 5º de Delicias.

Los dos distritos federales de la capital: el 6º y el 8º, serán para candidatos postulados por el PRI, a cuenta propia, luego de no lograr un acuerdo con el PAN para repartirse los cargos en la ciudad donde gobierna a todas luces el blanquiazul.

La versión es que el tricolor inscribirá a Fermín Ordoñez, ex presidente del Comité Municipal tricolor, pero hace muchos años. Parece que los priistas no tuvieron suficiente de la última ocasión cuando Ordoñez fue candidato, allá por el año de 2016, cuando no ganó una sola casilla en el distrito donde contendió por una diputación local.

O sea, que apenas acaba de regresar, después de andar tocando puertas en Morena, y ya le tienen su candidatura.

En el 8º iría Maurilio Ochoa, quien ya ganó alguna vez, pero en el distrito que sería el 6º.

En aquella ocasión, el empresario del huevo derrotó a Juan Blanco Zaldívar y con ello, prácticamente sacó al ex alcalde de Chihuahua de la contienda por la gubernatura del Estado en el 2010.

Aún queda por ver si también irán con plantilla propia de Ayuntamiento, sindicatura y candidatos a diputados locales en los cinco distritos de la capital.

De lo del 5º Distrito, todavía se cocina la probable postulación del ex diputado federal y cantante, Tony Meléndez, así igual, por separado del FAM.

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El secretario de Turismo de la 4T, Miguel Torruco, difundió en su cuenta de Facebook un mapa de cómo quedarían las líneas de ferrocarril para transporte de pasajeros en todo el país y, la verdad, al menos el dibujito se ve muy bonito.

Si fuera un mapa de las estaciones del metro de la Ciudad de México, vale, porque ahí se sabe que, en las intersecciones de estación se puede trasbordar, cambiar de línea e ir un destino más distante.

Acá no ha quedado nada claro, pues lo único que se sabe es que la línea que corresponde a Chihuahua saldrá—o llegará, según sea el sentido—desde Aguascalientes.

De ahí, parará en Zacatecas, luego en Torreón y desde la “Comarca” se iría derecho a nuestra capital, para luego dirigirse a la frontera.

Parece como una ruta villista por con estaciones de otras líneas que bien pueden llevarnos hasta Nuevo Laredo, la Ciudad de México o incluso al sureste del país.

Nada más estamos en espera que la Secretaría de Turismo nos aclare un punto: ¿dónde quedará la estación de pasajeros?

Porque, al menos en Chihuahua, la que se encuentra en División del Norte está cerrada “con tres candados”, como la Puerta Negra, y no se deja pasar a nadie que no sea empleado de la empresa Ferromex, concesionaria de la línea.

En las mismas estarán otros destinos, seguramente, pues cabe recordar que el presidente Ernesto Zedillo no se fue del cargo sin entregar toda la red ferroviaria a particulares. Así que, bonito el trenecito, nada más díganos dónde podemos subirnos.