La primera línea de defensa contra las enfermedades que trae consigo el invierno es el sistema inmunológico. Una de sus principales funciones es detectar y neutralizar cualquier amenaza que proviene del exterior, entre ellas los virus y las bacterias. Te compartimos cinco formas naturales de aumentar las defensas en esta temporada invernal.
Duerme 7 u 8 horas diarias
El sueño modula la respuesta inmunitaria y contribuye a que el cuerpo se regenere tras las lesiones. Desarrolla una rutina de sueño adecuada que te permita dormir entre 7 y 8 horas diarias.
Haz ejercicio
Cuando practicas un deporte no solo te mantienes en forma, sino que también contribuyes a fortalecer tu sistema inmunológico. Encuentra una rutina de tu agrado y realízala varias veces a la semana.
Reduce el estrés
En los tiempos actuales, las preocupaciones se multiplican y aparece el estrés, el cual puede interferir en la capacidad de los glóbulos blancos para combatir las infecciones. Incluye en tu día a día ejercicios como el yoga, técnicas de relajación o mindfulness.
Aliméntate sano
Los alimentos de origen vegetal como las frutas, vegetales, nueces, semillas y legumbres son ricos en nutrientes, fibra, vitamina C y antioxidantes que pueden reducir tu susceptibilidad a enfermarte. No te olvides de las grasas saludables como las que se encuentran en el aceite de oliva y el salmón.
Hidrátate bien
La deshidratación puede causar dolores de cabeza y dificultar el rendimiento físico, la concentración, el estado de ánimo, la función cardíaca y más complicaciones que pueden aumentar el riesgo de enfermarte. Así que asegúrate de beber mucha agua cada día.