César D.J.

“Si ustedes saben lo que es el sobreseimiento entenderán; yo no lo veo por ningún lado”, fue la respuesta del Fiscal General del Estado, César Gustavo Jáuregui Moreno, al ser cuestionado sobre la petición que busca la defensa del exgobernador César Horacio D.J.

Por otra parte, el funcionario también fue cuestionado sobre un posible cambio de forma en la que lleva a cabo el proceso el exgobernador, situación que dijo es clara ya que la juez determinó que no es necesario.

El sobreseimiento es la resolución que dicta un juez para suspender de manera definitiva o temporal un proceso penal basándose en un motivo de derecho o por insuficiencia de pruebas, por lo que el titular de la FGE no considera que aún no se ha llegado a este punto.

Jáuregui Moreno recordó que como fiscal tiene un trabajo por lo que llevará a cabo acciones que convengan al gobierno estatal, mientras que la defensa llevará a cabo acciones para el beneficio de su defendido.

Finalmente, Jáuregui Moreno señaló que en materia del arraigo domiciliario que se busca por parte de la defensa del también exdiputado federal, no se llevará a cabo ya que el imputado puede acceder a atención médica en el momento que lo requiera, por lo que al momento de salir del hospital volverá al centro penitenciario que se ubica en Aquiles Serdán.

La petición de sobreseimiento la planteó la defensa el pasado 24 de abril, cuando pese a que no se encontraba el imputado en la sala pidieron a la juez que se lleve a cabo la revisión para poder dar por sobreseído el caso, con lo que el exgobernador pudiera ser liberado.

Sin embargo, el Ministerio Público se negó a que se tocara el tema sin la presencia del exgobernador, situación que fue aceptada por la juez.

Nuevamente, por segunda ocasión en lo que va del año, fue suspendida la audiencia intermedia del exgobernador César Horacio D.J., esta vez, por motivo de salud, luego de que la madrugada del domingo fuera hospitalizado por una crisis hipertensiva.

La juez dio a conocer que fue a las 12:45 cuando llegó el reporte médico, donde se informó que el exmandatario presenta antecedentes cardiovasculares, obesidad grado uno, hipertensión, hipercolesterolemia primaria, enfermedad arterial coronaria, entre otros que le causaron la crisis.

Ante esto, la juez Delia Valentina Meléndez Olivas señaló que hasta que el médico lo dictamine se agendará la fecha para la audiencia intermedia.

Dentro de la audiencia que fue suspendida la defensa nuevamente solicitó que quien fuera gobernador de Chihuahua estuviera de manera virtual, situación que por parte del Ministerio Público solicitó que se negara, ya que es necesario la presencia del César Horacio para que se lleve a cabo la misma.

Por otra parte, la defensa nuevamente pidió a la juez que el imputado en el caso 3041/2019 se le cambie la medida cautelar y pueda llevar la pena en una vivienda con las medidas correspondientes.

Cabe recordar que no es la primera vez que piden esta medida, donde buscan que el exfuncionario priista cuente con vigilancia las 24 horas del día.

Tras la salida del exgobernador César D. J., a un hospital para atenderse de una cuestión médica, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya, mencionó que dicha persona es un reo más, sin ningún tipo de privilegio.

Señaló que es solamente un PPL (persona privada de su libertad) más.

“Para nosotros es un PP, es una persona con un número que nosotros tenemos que custodiar en todos los sentidos”, señaló.

Anotó que no le toca a la dependencia que encabeza, determinar si es real o no el padecimiento que refiere y únicamente les corresponde hacer el traslado a un hospital público si no tiene recursos y en el caso de que sí los tenga, llevarlo al nosocomio privado de su preferencia.

Loya comentó que “nosotros no somos quién para poder determinar si eso que manifiesta es real o no, lo que hacemos es trasladarlos a los hospitales”.

La audiencia intermedia del proceso penal en contra del exgobernador César D. J., volvió a declararse en receso, debido a que continúa internado en el hospital Star Médica bajo atención por un problema de tipo cardíaco.

La defensa del exmandatario solicitó autorización para que su representado hiciera presencia por vía remota mediante un dispositivo de comunicación, lo cual fue rechazado por el Ministerio Público al considerar que se violaría el debido proceso del propio procesado.

El pasado domingo, horas antes de la audiencia, el exgobernador César D.J., fue hospitalizado en la clínica Star Médica debido a un problema derivado de la hipertensión arterial que padece desde años atrás.

La audiencia inició pasadas de las 9 de la mañana y, desde el primer momento, la defensa pidió la presencia de su defendido por vía remota.

La parte acusatoria se remitió al numeral 9 del código de procedimientos penales y se encuentra elevado a rango constitucional en el artículo 20, por lo que pidió la presencia del exmandatario.

Sin embargo, la juez Delia Valentina Meléndez Olivas solicitó que se diera a conocer el estado de salud, por lo que solicitó que el cardiólogo Mario Alberto Valles Terrazas presentara un reporte del estado de médico del imputado, esto con el fin de no afectar la salud en caso de que no pudiera estar de forma presencial.

La defensa solicitó a la juez tratar temas relacionados con el caso, entre ellos el sobreseimiento de algunos puntos, por lo que esperan que dentro del receso se tuvieran avances en ellos.

Finalmente, se tomó un receso sin especificar el tiempo que se reanudará ésta que es la audiencia intermedia en el caso 3041/2019, donde se acusa al exfuncionario estatal por los delitos de peculado, por un monto que asciende a los 96 millones de pesos, de acuerdo a la evidencia contenía por la Fiscalía General del Estado.

Es el segundo aplazamiento de la audiencias contra D.J.

Es el segundo diferimiento de audiencia del procedimiento judicial contra el que fuera gobernador de Chihuahua en el periodo 2010 a 2016.

La anterior estaba programada para el 3 de abril pasado, pero la juez de control accedió a la petición del Ministerio Público de aplazarla, en virtud del nuevo cúmulo de pruebas de descargo que había presentado la defensa.

Días antes de esa audiencia, la defensa dio a conocer que su representado había sufrido un microinfarto, dato que no fue corroborado por la parte médica.