La presidenta de México Claudia Sheinbaum afirmó esta mañana que la marcha convocada bajo el nombre de la Generación Z recibió un impulso financiero de 90 millones de pesos, presuntamente aportados por la oposición y un empresario, con la intención de proyectar a nivel internacional una imagen de represión en México.
“Aquí se mostró que hubo un impulso de 90 millones de pesos, entregados desde la oposición y de un empresario”, declaró durante La Mañanera del Pueblo, al insistir en que la protesta no surgió de manera genuina entre jóvenes.
Sheinbaum sostuvo que la mayoría de los asistentes no correspondían al perfil generacional con el que se promocionó la marcha.
La mandataria añadió que un grupo que llegó al Zócalo lo hizo “muy violento”, equipado con martillos, marros y ganzúas, con la supuesta intención de derribar la valla colocada en la plancha.
“El objetivo era generar un hecho que pudiera ser presentado afuera como represión del gobierno”, aseguró.
Sheinbaum dijo que quienes financiaron y acompañaron la movilización buscaban “construir una narrativa” de agresiones oficiales contra manifestantes, principalmente jóvenes.
“Al revés, aquí protegemos a los jóvenes”, insistió.
