El primer anuncio de los Premios Nobel 2025 ya tiene nombres. El galardón en la categoría de Fisiología o Medicina fue otorgado a tres científicos que revelaron uno de los mecanismos más finos del cuerpo humano: cómo las defensas logran no volverse en su contra.
Los ganadores son Mary E. Brunkow y Fred Ramsdell, ambos de Estados Unidos, y Shimon Sakaguchi, de Japón. El Comité Nobel los reconoció por su trabajo sobre la tolerancia inmune periférica, un proceso que impide que el sistema inmunológico destruya los tejidos del propio organismo.
Un hallazgo que cambió la medicina moderna
Su descubrimiento permitió comprender mejor las llamadas enfermedades autoinmunes, aquellas en las que el cuerpo pierde la capacidad de distinguir entre lo propio y lo ajeno, y termina atacando órganos sanos.
Los investigadores identificaron un tipo de células conocidas como “células reguladoras”, que actúan como guardianas del equilibrio inmunológico, controlando a otras células para que no generen daños internos.
Este hallazgo abrió nuevas rutas para el tratamiento de padecimientos como la diabetes tipo 1, la esclerosis múltiple, el lupus y la artritis reumatoide, además de ofrecer esperanza en terapias contra el rechazo de trasplantes y algunas enfermedades inflamatorias graves.
Lo que viene
Durante los próximos días continuarán los anuncios de los Premios Nobel 2025 en las siguientes categorías:
• Física, el martes 7 de octubre.
• Química, el miércoles 8 de octubre.
• Literatura, el jueves 9 de octubre.
• Paz, el viernes 10 de octubre.
• Ciencias Económicas, el lunes 13 de octubre.
Los premios serán entregados el 10 de diciembre en Estocolmo, Suecia, en honor al aniversario luctuoso de Alfred Nobel, el inventor de la dinamita y creador del legado que impulsa estos reconocimientos.
¿Quién fue Alfred Nobel?
Alfred Nobel (1833–1896) fue un ingeniero, inventor y empresario sueco, conocido principalmente por haber creado la dinamita, un invento que revolucionó la minería y la construcción, pero también fue utilizado con fines bélicos.
A lo largo de su vida registró más de 350 patentes y acumuló una gran fortuna. Sin embargo, un año antes de su muerte decidió destinar la mayor parte de su herencia a la creación de un fondo que reconociera los mayores aportes a la humanidad en cinco áreas: Física, Química, Medicina, Literatura y Paz.
Su decisión surgió luego de que un periódico publicara por error su obituario con el título “El mercader de la muerte ha muerto”, lo que lo llevó a reflexionar sobre la huella que dejaría en el mundo. Desde entonces, los Premios Nobel se entregan cada año en Estocolmo, siguiendo el deseo de un hombre que quiso transformar su legado científico en un símbolo de paz y conocimiento.
