La Secretaría de Hacienda y el Banco de México (Banxico) tienen la posibilidad legal de implementar un programa de acumulación de reservas internacionales que serviría para sustituir el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Esto provocaría una corrección ordenada del superpeso, con lo cual el gobierno federal compensaría los ingresos que se están perdiendo por la apreciación del tipo de cambio, opinaron analistas.
Con ello, la autoridad monetaria estaría en condiciones de conservar su principal tasa en 11.25%, manteniéndose atractiva para inversionistas frente al rango de 5% a 5.25% de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
El economista en jefe para América Latina de Barclays, Gabriel Casillas, recordó que en noviembre próximo México debe renovar la Línea de Crédito Flexible (LCF) que tiene abierta con el FMI por un monto de 50 mil millones de dólares, la cual se podría sustituir con reservas internacionales.
“Con tantos dólares que están llegando, se podrían captar y hacer un programa de acumulación de reservas internacionales para poder reemplazar esa línea de crédito con el fondo”, estableció.