Al tiempo que la Rectoría de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) daba por terminado el conflicto con los estudiantes que demandan gratuidad absoluta en las escuelas de educación superior, un grupo de alumnos inició una campaña a través de la plataforma Change.org para demandar la inmediata liberación de las cinco personas que quedaron detenidas después de los disturbios del 15 de mayo.

En la demanda, la iniciadora, Heidi Rivas Lara, presenta un pliego de seis puntos, dirigido al rector Luis Alfonso Rivera Campos, del cual sobresale la petición de diálogo y el reclamo por el despliegue policiaco alrededor de la Rectoría de la UACH durante el tiempo que duró tomado el edificio.

El documento llevaba 447 firmas de apoyo de las 500 que se propuso la iniciadora, cuando eran las 16:50 de la tarde de este jueves 16 de mayo.

Sin embargo, cualquiera que sea el resultado de esa participación vía Change.org, el rector ya fijó una postura y no es precisamente la del diálogo y la conciliación con el alumnado inconforme.

Para empezar, ya dividió a los más de 31 mil estudiantes universitarios en dos grupos: los “genuinos” y los que tienen alguna preferencia partidista.

De ser así, ¿entonces él no era genuino? Porque su militancia priista es conocida y reconocida, al igual que cientos de docentes y directivos que ha tenido la UACH a lo largo de su historia.

Tampoco tiene contemplado menguar sus acciones legales en contra de las cinco personas detenidas: Eddy Loera, Daniel Carrera, Raúl Palma, Cristian Villalobos y la señora Guadalupe Muñoz.

Nada de eso. Ahora los acusa de motín y secuestro. Al menos el segundo es un delito muy grave por el que no se alcanza fianza. ¿Realmente secuestraron a alguien esos estudiantes?

A reserva de lo que diga el Ministerio Público y lo que resuelva el juez de la causa –si fuera el caso que llegara hasta ese punto– un proceso judicial de ese tipo contra cinco estudiantes no abona en lo absoluto al diálogo ni al acuerdo.

La demanda de los estudiantes, de recibir educación superior sin pagar un centavo, está mezclada con una serie de reclamos hacia la actual administración universitaria, por el mal estado de las instalaciones y los grandes gastos en viajes y otras que no son prioritarias.

Tan no mostró disposición al diálogo, que el mismo miércoles le tuvo que entrar al quite el secretario General de Gobierno, Santiago de la Peña.

Esto, después de que la propia gobernadora, Maru Campos, le “sugiriera” a su primo, el rector, que dialogara con los estudiantes. No lo hizo como debiera y ahí va De la Peña a sacarle las castañas del fuego.

En espera de ver en qué acaba todo esto, por lo pronto, Rivera Campos no le abona nada a una salida del problema pacífica y dialogada.

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El candidato a la Presidencia Municipal de Chihuahua por la 4T, Miguel La Torre, aventó un cohete encendido durante el debate del pasado miércoles, cuando aseguró que el exgobernador César D.J. saldrá de prisión el próximo 5 de junio.

Sin entrar más en detalles, el aspirante a alcalde la dejó ahí, como una “dejadita”, como para que alguien la remate, sin dar mayores datos ni indicios para confirmar la precisión de su pronóstico.

En esta misma columna, les habíamos adelantado que el cambio de medida cautelar esperaría hasta después de la jornada del 2 de junio, cuando al menos millón y medio de chihuahuenses saldrían a votar por presidenta o presidente de la República, pero también, por la conformación del Congreso del Estado.

Es decir, que el grupo que promueve la liberación del exmandatario ya da por hecho que sale, y pronto, nada más queda esperar el “timing” político que permita continuar su proceso judicial en reclusión domiciliaria.

Como ya es bien sabido, el equipo de asesores legales del exmandatario ha solicitado de manera reiterada y sostenida el cambio de condición para que pueda continuar su proceso en libertad, pero hasta ahora, lo hemos informado aquí, se los han negado al menos en 8 ocasiones.

La piedra que lanzó La Torre no anda tan errada, pues contempla que el ballezano dejaría San Guillermo y se instalaría en el domicilio que él declare como su lugar de residencia justamente el miércoles 5 de junio.

¿Qué tiene de particular ese día? Que, para ese entonces, habrá terminado el cómputo distrital y ya se podrá saber cómo irá quedando la conformación de las Cámaras de Diputados y el mismo Congreso de Estado.

Es el 5, no el 3, no el 4, porque en esos días no habrá nada resuelto aún.

Algo sabe el expanista metido ahora a candidato morenista, porque se atrevió a aventar el petardo en pleno debate entre aspirantes a la Presidencia Municipal de Chihuahua.

O sea que, en estricto sentido, ni al caso el tema de un político sometido a juicio con la confrontación de ideas entre candidatos a una alcaldía.

Sin embargo, aunque los asuntos sean ajenos, ya dejó la chicharra ardiendo ahí, en medio del salón. Se va o se queda en San Guillermo, esa es la cuestión, aunque la operación política del exgobernador sigue a todo lo que da.

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Los morenistas andan haciendo cuentas alegres a partir de una serie de actos de campaña celebrados en municipios de vocación rural, donde han tenido “plaza llena” y concurridas marchas de apoyo a los candidatos de la 4T.

La respuesta ha sido tal –nos dicen los optimistas– que podrían ganar gran parte de los municipios del sureste y centro-este del estado, que solían ser banco de voto “verde” para el PRI.

Así, llevan una cuenta en la cual, incluyen a municipios como Chínipas, Guazapares, Urique, Temósachi, Guerrero y El Tule, entre los que ya tienen “en la bolsa”.

Y a esos le suman los de Hidalgo del Parral, Jiménez y San Francisco del Oro. Si las cuentas alegres les salen, podrían ganar no solo esos municipios, sino algunos de los distritos en disputa.

En fin, los optimistas tienen derecho. Y acaso no les falte razón para andar haciendo cortes de caja con números negros, porque tienen toda la “manga” para promover los recursos y programas del Gobierno Federal.

No sería novedad que el partido que encabeza el Gobierno Federal pase a tomar el control del voto “verde”, el de la zona rural, merced de los programas de apoyo al campo que históricamente se han manejado con especial énfasis en temporada electoral.

Así le pasó al PAN en los sexenios de Fox y Calderón, cuando ganaban en municipios que, en otras épocas, no les daban el triunfo ni en una casilla.

Y tal vez no les falten motivos para echarse confeti y serpentinas. Si no, aquí les dejamos un dato: el programa “Sembrando vidas” ha repartido más de 11 mil millones de pesos en los años del gobierno obradorista.

Algunos consideran que ese programa fue lo que salvó a la sierra de padecer una terrible hambruna durante el año 2023.

¿Apoco eso no va a “pegar” en la casilla? Ya lo veremos.

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Listo el dato: son 50 mil 359 chihuahuenses los que están inscritos para emitir su voto el próximo 2 de junio desde el extranjero.

Después de mucho ir y venir, de tardanzas, de envíos de documentación a paso de oruga y de un intento por “depurar” la lista de votantes desde el exterior, finalmente se aceptaron a esa cantidad de conciudadanos.

¿Son muchos, son pocos? Habría que ver el dato de manera relativa, porque 61 de los 67 municipios de la entidad no cuentan con tanto elector entre sus habitantes.

O sea que, si fueran municipio, los chihuahuenses en el exterior serían la séptima concentración poblacional más grande, detrás de Juárez, Chihuahua, Cuauhtémoc, Delicias, Hidalgo del Parral y Nuevo Casas Grandes.

Ahora bien, ¿cuántos irán a votar? Como siempre, habrá qué esperar el cierre de las casillas y el conteo de las boletas. Sin embargo, de aquel total, 23 mil 591 chihuahuenses recién hicieron el trámite de activación de su credencial de elector.

Esto indica el grado de interés que tienen por participar en la que muchos anticipan será la elección más grande y concurrida de la historia del país.

En total, son un millón 480 mil 342 ciudadanos mexicanos radicados en el extranjero que ya se registraron como electores efectivos para participar en los comicios de este año.

A reserva de esperar el resultado, el interés mostrado a pesar de todas las trabas que les puso el INE, hace pensar que tendrán un porcentaje de participación elevado, en una de esas, mayor al que tendremos en el estado.