Una parte del morenismo de base envió este martes una carta a la aspirante presidencial, Claudia Sheinbaum, para protestar por la inclusión del exgobernador panista, Javier Corral Jurado, en el equipo que se encargará de conformar su proyecto de nación.

La organización “Regenerando el Estado Grande” se dirigió a la virtual candidata para pedir que reconsidere ese nombramiento, al cual calificaron como una “desafortunada decisión”.

¿Así o más rejegos a trabajar con el “siempre simpático” exmuchos cargos, siempre postulado por Acción Nacional?

Si eso no dejó en claro el caso, la agrupación de marras califica de “agravio” el hecho de que haya sumado a un personaje al que consideran fue un gobernador “gris”.

Su período de gobierno, le dicen a Sheinbaum, refiriéndose a Corral, fue “sangriento, corrupto e impune”. ¡Duro y a la cabeza con ese neo morenista de fachada!

En el cierre de la misiva, que no tiene desperdicio, le auguran a la morenista que su nuevo aliado, lejos de sumar, le restará a la causa de la 4T.

Por lo visto, las y los fundadores del partido del presidente AMLO no olvidan todas las pedradas que les mandó el entonces gobernador, ni los “mayoritazos” que les arrimó en el Congreso del Estado.

Tampoco pasan de noche todas aquellas declaraciones que hiciera en contra del gobierno de López Obrador y la insidiosa comparación que hiciera con el de Peña Nieto.

Una más de las quejas hacia la “coordinadora” y nueva dueña del bastón de mando; una más de las muchas que oirá de aquí y hasta que pase la campaña, y peor aún, si lo llegase a incluir en su gabinete.

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El Congreso del Estado aprobó una reforma a la estructura del Gobierno del Estado con la cual se da paso a la creación de dos super secretarías que absorberán todas las funciones propias de las tareas “de Palacio”.

La nueva Oficina de la Gubernatura del Estado, organismo nuevo, que no estaba contemplado en el presupuesto 2023, se encargará ahora de las funciones de la Secretaría Particular, la planeación de la Administración Pública Estatal, la coordinación de personas asesoras y las representaciones del Gobierno de la Entidad en la Ciudad de México y Ciudad Juárez.

¡Poca cosa! O sea, va a llevar la agenda de la gobernadora; a tripular la operación en la capital del país y en la frontera norte y, además, la planeación y evaluación de la administración estatal.

¿Quién será el “afortunado” que se haga cargo de todo ese mandado?

Todo indica que será Fernando Álvarez Monje, el dos veces presidente estatal del PAN y dos veces coordinador parlamentario, quien empezó de bajo perfil en la actual administración y hoy en día despacha como secretario particular de la gobernadora Maru Campos.

Del otro lado tendremos a una Secretaría General de Gobierno que se hará cargo de todo el trabajo que acaparaba la desaparecida Secretaría de Coordinación de Gabinete, esa especie de amasijo que se formó en la administración de Javier Corral y que, hasta este año, manejaba un presupuesto de casi 500 millones de pesos.

Ahora, esas operaciones quedarán a cargo de la Secretaría General de Gobierno, que encabeza Santiago de la Peña, la cual ya era suficientemente grande, pues tiene a su cargo al menos 10 dependencias, a cuál más de delicadas, como Gobernación, Transporte, Registro Civil y Registro Público de la propiedad, entre otros.

O sea que aquí ya no hay “Serratos”, pero sí habrá al menos dos súper secretarios.

Por lo demás, la Consejería Jurídica, creada en el gobierno de César Duarte, y la Coordinación de Política Digital, en tiempos de Corral, se integran al despacho de la titular del Ejecutivo.

Tenemos, pues un reacomodo de fichas, de cara al inicio de la segunda mitad del sexenio.

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En el gremio de las empresas impresoras ya corre fuerte el descontento hacia el secretario de Turismo del Gobierno del Estado, Edibray Gómez, porque, de plano, no les manda hacer ni una tarjeta de felicitación.

Y eso ¿por qué? Pues nada más y nada menos porque él es el dueño—o así parece—de una de las empresas impresoras más grandes del estado: IMAP.

El funcionario, que antes de sumarse a la administración pública fue presidente de Canaco, tiene sobre su cabeza una nube de sospecha por la supuesta venta de productos y servicios de impresión al gobierno para el cual trabaja.

Si bien él se ha deslindado de la empresa antes mencionada, de la cual, asegura, ya no es el dueño, en el ambiente de los impresores se da por hecho que sigue operándola, así sea a distancia, y con la otra mano, se firma o consigue los contratos de impresión y encuadernación.

El descontento viene no solo por los grandes contratos que suele hacer un Gobierno estatal, sino porque se queda hasta con los más chicos. O sea, que ni un block de notas le manda hacer a los que antes fueron sus competidores.

Luego, nos aseguran, ni siquiera cumple con los tiempos de entrega que sí les exigen a otras empresas.

Todo eso, sin tocar el tema de los malogrados “cuadernillos” de educación, que iban a tomar el lugar de los libros de texto gratuitos, y que terminaron sólo Dios sabe dónde.

La cifra y el nombre del contratista permanecerá como un misterio, ya que esos datos quedaron clasificados como información reservada.

Visto desde ese ángulo, no se sabe qué es peor para el actual secretario, si dejar que crezca la duda de un posible conflicto de interés a su favor, o decirles a los cuatro vientos que IMAP se aventó esa “liebrita” de a muchos millones de pesos.

Eso pasa o suele suceder cuando un exitoso empresario decide “sacrificarse” por su comunidad y aceptar un cargo en la administración pública. O sea, si su empresa era tan exitosa ¿para qué acepta otra chamba?

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Dice el refrán popular: “Aclaración no pedida, aceptación de culpa”, y éste le viene muy bien al “tuitazo” que subió la diputada federal Lilia Aguilar Gil, horas después de haber acusado a Javier Corral de ser el homicida de su madre, Matilde Gil.

“Quiero dejar algo muy claro. Estuve, Estoy y Estaré en el proyecto de #Transformacion de la Dra.  @Claudiashein. En la construcción del segundo piso de la #4T. Que no queden dudas de ello”.

O sea ¿Alguien tenía una duda al respecto? ¿quién preguntó si seguía en la 4T o se había pasado al frente “Puro Corazón”? Quién sabe si en los corrillos de la alianza que impulsa a la doctora Sheinbaum, pero de ahí en más, pues…

La hija de Rubén Aguilar sostiene que Corral “asesinó” a su madre, aunque en realidad lo acusa de haber sido omiso en la investigación en torno a la muerte de la también activista del PT, ocurrida en el año 2017.

Desde que Aguilar Jiménez denunció la desaparición de su esposa, acusó que el gobierno corralista no hacía lo necesario para atrapar a los autores materiales del crimen y que, por el contrario: lograron sentenciar a dos, pero casi les pusieron el caminito para que huyeran a otros dos presuntos implicados.

El mensaje de la petista viene al caso no solo por la acusación que le hiciera al exgobernador de Chihuahua, apenas tres días después de que la aspirante presidencial lo presentara como parte de su equipo de trabajo previo al inicio de la campaña, sino por el trato que le han dado las y los morenistas de la localidad.

Las dudas sobre la lealtad de los Aguilar hacia la 4T vienen desde tiempo atrás, cuando la representación de ese partido en el Congreso del Estado votaba todo a favor de las iniciativas prianistas y dejaba colgados de la brocha a los de Morena.

La sospecha subió de color cuando vieron que había en la mesa dos propuestas para integrar magistraturas del Poder Judicial con personas plenamente identificadas con el PT, uno de ellos, Rubén Aguilar Gil, hermano de la diputada.

Ahora, Lilia busca la candidatura de la 4T al Senado de la República, para la cual dice contar con el “boleto a la gran final”, porque es la única propuesta que tiene el partido que preside su padre.

Sin embargo, hacia adentro de Morena crece la “incomodidad” hacia una política a quien ven más como aliada del Gobierno panista que a la coalición que postulará a Sheinbaum.

¿Será por eso lo de la aclaración no pedida?