A esos de Morena no les llovió, ¡les granizó en la elección del 2021! Todavía están pagando las que deben, literalmente, y en una de esas hasta les pega en el resultado del 2024.

Como se recodará, en aquel año se celebró el proceso para elegir gobernador o gobernadora, en el cual participaron Juan Carlos Loera por Morena, y Maru Campos por el PAN y PRD, aunque luego también con el apoyo del PRI.

A los de guinda y blanco les fue tan mal que perdieron la contienda con un resultado de 569 mil 921 votos para Maru contra 440 mil 672 para Loera, es decir, con una diferencia de 9.6%, que ni con pomada se la pudieron quitar.

Sin embargo, el mal resultado electoral y la poca representación en el Congreso del Estado—el PRIAN se quedó con la mayoría calificada, y ni de broma se asustan—fue casi tan doloroso como la sanción económica que les aplicó el órgano electoral por no entregar los informes financieros a tiempo.

Nada más y nada menos, 25 millones 909 mil 801 pesos de multa que aplicó el Instituto Estatal Electoral, de la autoridad electoral, “en gran parte por la omisión de informes puntuales de la campaña del candidato a la gubernatura en el proceso electoral 2021.

Sin embargo, de acuerdo con información solicitada vía transparencia, hasta el mes de diciembre del 2023, el IEE le había retenido a Morena la cantidad de 41 millones 767 mil 441.50 pesos.

O sea, que ya fue grande, pues le ha cobrado 15 millones 857 mil 640.50 más que lo de aquella dichosa multa.

La información obtenida mediante solicitud nos indica que, de 70 millones 112 mil que debieron caer a sus arcas, solo le llegaron 27 millones 950.7 mil pesos.

Y para colmo de males, sus dos socios electorales, el PT y el PVEM, tuvieron tan baja votación en aquel 2021 que se quedaron sin prerrogativas.

Así, con ese boquete económico, en un estado donde no gobiernan, se la van a tener qué jugar, a ver cómo.

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Los primeros 70 meses del alcalde Marco “Marquito” Bonilla han sido los más violentos en la historia reciente del municipio de Chihuahua, según lo indica el informe del Observatorio Ciudadano de Ficosec.

Cuando había pasado ese lapso, equivalente a dos años y dos meses, la capital del estado había registrado la friolera de 891 homicidios, una cantidad que equivale a 12.7 casos por mes.

La cifra superó el registro de 879 casos registrados en el mismo lapso, pero del segundo mandato de la alcaldesa Maru Campos, y los 789 del primer período de la misma.

Sin embargo, quedó a más del doble del que se registró durante el gobierno de Javier Garfio Pacheco, quien gobernó el municipio de Chihuahua de octubre del 2013 al mismo mes, pero del 2016.

En ese lapso, el registro fue de 430 homicidios, a razón de 6.1 por mes, que ya eran muchos, pero lo de ahora es de terror.

Ya entendemos por qué Chihuahua está en el “Top 30” de las ciudades más violentas del país.

Pero déjenlo, Marquito sigue paseándose, y presumiendo de los logros de su administración en materia de seguridad. Ándele pues, ahí están los números, para no discutir.

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Todo indica que Crucito Pérez Cuéllar se va a apuntar una estrellita más en la cacha de su pistola, y le va a poner otra “cruz” a las candidaturas que apoya su “entrañable amigo”, Juan Carlos Loera de la Rosa.

Nos cuentan en que el estratégico municipio de Cuauhtémoc, el crucista Omar García ya tomó una delantera que difícilmente va a soltar, en la búsqueda de la candidatura de Morena a la presidencia de ese municipio.

Las cartas que nos llegan desde el morenismo cuauhtemense nos confirman que el “ahijado” del alcalde juarense ya dejó otros aspirantes y, mejor aún para él, a la ex priista Lupita Pérez.

Esta última, apoyada por Juan Carlos Loera, se había mantenido en la punta durante varias semanas, pero a últimas fechas se “desinfló”, según nos comentan.

En su contra pesó que se decidió a entrar cuando ya era tarde, pese a que traía buenos indicadores de aceptación, pero, sobre todo, a que su padrino no las tiene todas consigo en aquella región.

La ex priista y alguna vez delegada de Conducef apoyó a Loera en su campaña para obtener la candidatura a la alcaldía de Juárez; luego, la del Senado, que finalmente obtuvo, y recientemente se hizo acompañar del ex súper delegado a su registro como aspirante.

Como diría la Lupe D’Alessio: “ese fue su error”. Apoyar a Loera “lo era” bastantes riesgos en Cuauhtémoc, tierra de “cruces”.

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La que se llevó el día este jueves 11 de enero fue la Coordinación Estatal de Protección Civil.

De plano, está peor que Pedro y el Lobo: primero grita que ahí viene, luego no llega y cuando realmente esté en camino, no se la vamos a creer.

Desde un día antes, emitió un comunicado en el que advertía de la presencia de vientos de hasta 95 kilómetros por hora y bueno, al menos en la capital, los ventarrones estuvieron fuertes, pero no a ese nivel, y menos como para suspender actividades.

Pero bueno, son pronósticos del clima y ahí hasta el más pintado sale paliducho. Lo que no tiene desperdicio es el comunicado en el que le pide a la población que tome una serie de medidas que le correspondían a la propia Coordinación.

¿Cómo cuáles? Como la de dar “mantenimiento a letreros y anuncios espectaculares”. Con el debido respeto, pero ese trabajo le corresponde a la autoridad. ¿Cómo va a andar un hijo de vecino subiéndose a las alturas para ver si el cartelón donde aparece la propaganda de un candidato o candidata está bien asegurado?

Lo otro, de llenar el tinaco, pues pónganse de acuerdo, porque apenas días antes nos pidieron que los vaciáramos, que porque iba a caer Alaska encima de Chihuahua y todo se iba a congelar.

En fin, que nomás no dan una y sus preventivas se ven más como una exhibida de todo lo que no hicieron durante el año.