Si no era pasarela ¡qué desperdicio de pinta! El informe de la gobernadora Maru Campos, su primero desde que tomó posesión, atrajo a todos los actores políticos del PAN que buscan la candidatura presidencial e, incluso, la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y hasta los cargos que quedarán como factores de reacomodo para resistir los embates de la división post-destape.

El diputado Santiago Creel dejó en claro que venía a Chihuahua a apoyar a la chihuahuense, pero también dejó en claro que él “va” para la Presidencia. Si Maru quiere, que se espere, parecía decir.

El panismo en pleno se agrupó en la capital del estado desde el viernes, con tiempo suficiente de antelación para echar grilla, reagruparse y fijar estrategias de cara a las definiciones que vienen.

Si bien los vestigios del grupo de Felipe Calderón siguen presentes, el foxismo que representa Santiago Creel dominó el escenario con la presencia del mismísimo expresidente, quien de paso de llevó la mañana del sábado con la retumbante ovación que siguió a su presentación en el Informe de Gobierno de Maru.

Aunque se formaron en círculo, los panistas del país dejaron en claro que aún no tienen candidato definido, pese al protagonismo de Creel, pues también rondaron por el ruedo político la senadora Lilly Téllez y los gobernadores Mauricio Vila y Mauricio Kuri, de Yucatán y Querétaro, activos como andan tras la postulación.

Como sea, Maru quedó bien plantada en el escenario nacional, sin ponerse a las patadas con el gobierno de AMLO, con una recepción más que cordial al secretario de Gobernación y “corcholato”, Adán Augusto López y un discreto “apapacho” al coordinador de los senadores del PRI, Miguel Ángel Osorio Chong.

Ahí la lleva, dijo Fox. Maru tiene pinta, pero tal vez no le toque en esta.

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El proyecto insigne de vivienda del gobierno de Javier Corral se vino abajo cual si hubiera sido un castillo de palillos chinos.

Se trata de aquel plan, anunciado con bombo y platillo, de construir torres de departamentos en el centro de la capital de Chihuahua.

La “Torre”, que incluiría decenas de viviendas de tipo vertical, iba a quedar enclavada en el mero centro, entre las calles Aldama y Constitución, a unas cuatro cuadras del Palacio de Gobierno.

En aquellos años del corralato, no pocos se entusiasmaron con la idea de habitar en el centro de la ciudad y más aún si lo hacía en un departamento nuevo, comprado a crédito y con obra de reordenamiento hecha por el Gobierno.

Junto con ese proyecto a punto de derrumbarse, corría el del Fovissste, organismo federal que contemplaba un plan similar que quedaría en la esquina contigua. Pues tampoco va.

Las torres de departamentos fueron algunas de las pocas obras que lograron emocionar a parte de la población durante el gobierno de Corral, pero parece que ni esa se hará.

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Este sábado, durante la lectura de su informe, la gobernadora Maru Campos se refirió a Enrique Rascón Carrillo como secretario de Pueblos y Comunidades Indígenas. A lo mejor y hasta se emocionó con el nombramiento que le dieron en pleno informe de actividades de su jefa.

Lástima por él, porque la creación de la tal secretaría todavía debe pasar por un largo y sinuoso camino que cruza por terrenos judiciales, pues hay un amparo concedido por la justicia federal que ordenó prácticamente reponer el procedimiento y caminar por la ruta larga de la consulta informada entre comunidades y pueblos originarios.

Dicho de otra forma: ni Rascón tiene el nombramiento, ni el Gobierno tiene su secretaría. Alguien debió revisar el texto que iba a leer la “gober” antes de dejarla que cometiera un error en la lectura de su informe. Zape en la nuca es lo que se merecen esos “asesores”.

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Nomás no hay un acuerdo entre la UACH y el IMSS para reanudar el envío de pasantes de la Facultad de Medicina a los municipios más alejados de la zona urbana.

A esta Doña le cuentan que el rector Luis Alfonso Rivera Campos ha pedido que alcaldes y el propio Gobierno del Estado se comprometan a mantener operativos de vigilancia en torno a los médicos pasantes, como condición para mandarlos a aquellos lares de Dios.

Sin embargo, dicen los mironianos informantes, las partes se han topado con otro problema: que tampoco hay policías para mandar a aquellos municipios donde la delincuencia organizada se pasea a sus anchas.

Lo malo es que para los habitantes de aquellas sufridas tierras, el pasante era el único doctor que tenían a la mano. Si a eso le sumamos que la UACH planea guardarse a sus prestadores de servicio para su propio hospital, la Sierra se cierra a toda posibilidad de recibir atención médica.