La Reserva Federal (FED) de Estados Unidos optó por mantener sin variación el nivel de la tasa de interés, situándola en un rango de entre 5.25 y 5.50 por ciento. Esta decisión, en línea con las expectativas del mercado, refleja una continuidad con respecto a la reunión anterior en enero, informaron medios estadounidenses.
La tasa de referencia ha permanecido en este nivel desde la determinación tomada en julio de 2023, marcando así el período más prolongado de estabilidad en los últimos 22 años. No obstante, los inversores se mantienen atentos al tono del comunicado oficial y a las nuevas perspectivas de la Fed, las cuales son actualizadas trimestralmente.
La Fed expresó en su comunicado de este miércoles: “Al considerar cualquier ajuste al rango objetivo para la tasa de fondos federales, el Comité evaluará cuidadosamente los datos entrantes, la evolución de las perspectivas y el equilibrio de riesgos”. Asimismo, agregó que el Comité no anticipa la reducción del rango objetivo hasta que haya ganado mayor confianza en que la inflación se esté moviendo de manera sostenible hacia el 2 por ciento.
Esta decisión se produce en un contexto en el que el Índice de precios del consumo personal (PCE, en inglés), indicador clave seguido por la Fed para sus decisiones de política monetaria, registró un aumento del 2.4 por ciento anual en enero, mientras que la inflación subyacente se situó en el 2.8 por ciento.