El hallazgo, en el que en primera instancia se mencionaba a siete cadáveres desnudos y apilados, subió a nueve, según versiones de las autoridades.
Los cuerpos todos de sexo masculino se encontraron a la altura del kilómetro 37 de carretera libre a Ciudad Juárez.
Los asesinados mostraban claros signos de tortura, uno de ellos tenía clavado un cuchillo con una cartulina con un mensaje escrito.
Esta sería una de las más grandes masacres que se registran en la historia reciente en las inmediaciones de la capital del estado.