En Chihuahua, el cáncer de mama cobra más vidas que en cualquier otro estado de México: 27 fallecimientos por cada 100 mil mujeres mayores de 20 años, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La cifra supera por amplio margen el promedio nacional —18.7— y más que duplica la registrada en los estados más pobres del país, donde la tasa no rebasa las 13 muertes por cada 100 mil mujeres mayores de 20 años.
Especialistas consultados no logran identificar una causa precisa. Entre las hipótesis figuran los factores genéticos, los hábitos de vida y las deficiencias en la detección oportuna, aunque no existe evidencia que relacione el fenómeno con la condición socioeconómica o el clima de una región.
El ginecólogo oncólogo César Aguilar Torres comenta que no hay una manera clara de explicar por qué existen diferencias tan marcadas entre estados dentro de un mismo país.
En entrevista con Norte Digital, el especialista —quien ha encabezado diversas campañas de prevención del cáncer de mama— consideró que no hay un indicador que aclare por qué, en entidades con mayor desarrollo económico como Chihuahua, la tasa duplica a la de Guerrero, uno de los estados con mayores rezagos sociales.
De acuerdo con el informe del Inegi publicado el 16 de octubre, con motivo del Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama, los estados de Guerrero, Oaxaca, Tlaxcala y Chiapas presentan las tasas de mortalidad más bajas por esta causa.
En contraste, Chihuahua, Coahuila, Sonora, Baja California, Colima y Jalisco registran tasas superiores a los 20 fallecimientos por cada 100 mil mujeres.
Existen factores que podrían incidir, como el tipo de alimentación. En Chihuahua predomina el consumo de carne roja, mientras que en Sinaloa —que presenta una incidencia menor— es más común el consumo de pescado, añadió Aguilar.
En el caso de los estados del sur, su baja incidencia podría estar relacionada con una mayor fecundidad y el embarazo a edades tempranas.
El cáncer de mama es una enfermedad en la que las células de la glándula mamaria se alteran y multiplican sin control. Forman tumores que, de no ser tratados de manera oportuna, pueden propagarse a otras partes del cuerpo y causar la muerte.
Aumenta la incidencia en los últimos 10 años
Durante la última década, la tasa de defunciones por cáncer de mama aumentó de 15.7 en 2015 a 18.7 en 2024 por cada 100 mil mujeres de 20 años y más.
En 2024 se registraron 818 mil 437 fallecimientos en todo el país, de los cuales 94 mil 6 (11.5 por ciento) fueron por tumores malignos y, de estos, 8 mil 451 (9.0 por ciento) se debieron al cáncer de mama, según el reporte del Inegi.
De las muertes por esta causa, 8 mil 384 (99.2 por ciento) ocurrieron en mujeres y 67 (0.8 por ciento), en hombres. El cáncer de mama representó 1.0 por ciento del total de defunciones del país y fue la principal causa entre los tumores malignos.
Las cifras confirman que el cáncer de mama continúa siendo un desafío de salud pública en Chihuahua y en el país. Autoridades sanitarias y especialistas coinciden en que la detección temprana, el acceso a servicios de diagnóstico y el fortalecimiento de campañas de prevención son claves para reducir la mortalidad en los próximos años.