Por si algo faltara en la Sierra de Chihuahua con el agobio que se sufre por la delincuencia, ahora son las mujeres las que huyen de sus comunidades para evitar ser víctimas de delitos sexuales por parte de miembros de organizaciones criminales.

El problema está que arde, nos dicen personas cercanas a ese penoso fenómeno, pues las afectadas no tienen de otra que huir de sus lugares de origen para ponerse a salvo o para ya no sufrir otra desgracia de ese tipo.

Si las mujeres de mancha urbana tienen problemas para denunciar casos de acoso o ataque sexual, ¡cómo les irá a las de las zonas rurales, donde no hay ni siquiera dónde poner una querella!

Ese es otro tipo de desplazamiento, el de la mujer que busca ponerse fuera de peligro porque a la autoridad no le ocupa o no le interesa atender ese fenómeno.

Ese gravísimo problema se agrega a todos los ataques que han sufrido pobladores de diversas comunidades serranas para quitarles sus tierras.

Nos cuentan con profundo dolor personas que conocen la problemática que hay zonas donde se dan los enfrentamientos entre bandas y a la gente que ni vela tiene en el entierro es a la que peor le va, porque tienen que irse para ponerse a salvo y luego ya no pueden regresar.

Lo peor es que, cuando demandan justicia, les piden que viajen horas y horas, a veces a pie, desde su comunidad rural hasta la cabecera de su municipio para presentar su denuncia, y luego, otro viaje igual de tortuoso para ratificarla.

Afortunadamente ya se formó un organismo gubernamental dedicado específicamente a atender la problemática, pero falta mucho tiempo para que esos miles de habitantes de la sierra se reubiquen o, de plano, se asienten con toda dignidad en el lugar donde encontraron refugio.

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El sur del estado es el “ring” donde se está dando un auténtico combate de pesos completos como para función estelar en Las Vegas, donde dos auténticos “mastodontes” del mundo empresarial se disputarán un yacimiento de ricos minerales.

Santa Bárbara, uno de los pueblos mineros más antiguos del norte de México, es el lugar donde se están midiendo ya los dos grandes, ¡qué grandes: gigantes! de la industria de la extracción, en algo que promete ser una confrontación de pronósticos reservados.

Nos cuentan las fuentes cercanas al conflicto en ciernes que son dos de las empresas más grandes del país y a dos de los empresarios más poderosos y acaudalados, qué decimos de México ¡del mundo!

Actualmente, el pleito todavía no sale a la superficie, pero ya se están dando con el zapapico para aprovechar un banco de minerales que está, como quién dice, entre dos minas.

No será la primera vez que la industria extractiva presencia un pleito de esa naturaleza, donde dos empresas se disputan un manto de petróleo, un banco de minerales o una veta de oro con el cuento de que está en la parte que les corresponde.

Aquí lo que hará falta es un trabajo de bordado muy fino de los tres órdenes de Gobierno, pero, principalmente, de la 4T, para evitar que esto llegue a mayores y se lleven por delante a la economía de nuestra querida Santa Bárbara, que tanta historia le ha dado a la entidad.

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Al gobierno de Marquitos Bonilla le puede caer el dicho ese tan popular que reza: “¡hágase tu voluntad…pero en los bueyes de mi compadre!”

Tanto que claman por transparencia, por acceso a la información y por el respeto a la libre expresión y cuando son ellos los que tienen la obligación de abrir las puertas y poner todo en una vitrina para que el mundo entero lo vea, prefieren dar el portazo, correr a “extraños” y manejar todo en “petit comité”.

Este martes, el Gobierno municipal convocó a una reunión para exponer sus “otros datos” sobre el impacto ambiental del nuevo relleno sanitario, pero lo hizo a puerta cerrada y sin permitir el acceso a nadie.

Vaya, hasta al diputado Oscar Castrejón lo corrieron con el argumento de que era “de Morena”. Como si eso le quitara el derecho a estar informado.

La reunión de marras tuvo entre sus invitados a los investigadores de la UACH que hicieron el estudio según el cual —siempre de acuerdo con la versión de Marquitos—, el relleno sanitario nuevo no causará problema ecológico alguno.

También acudieron algunos regidores —no todos—, y funcionarios de la administración de Marquitos.

¿Y los medios de comunicación? Sacados a punta de gritos y de “acusaciones” de ser enviados de Morena y de los promotores del amparo que tiene ahora parada la dichosa obra con la que el alcalde “Gutierritos” de Chihuahua quiere salvar su gestión.

Tanto que hablan de transparencia y a las primeras de cambio enseñan el cobre. Con esas actitudes, no nos va a quedar otra que creerle a los que dicen que el tal relleno es dañino para la salud ambiental del municipio y que no es otra cosa que un pretexto para hacer negocios al amparo de la administración pública.

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Indudablemente el Imperio Romano es considerado como uno de los más grandes e importantes, con mayor influencia en el quehacer de la humanidad, en los últimos 2 mil años y fracción que llevamos de era cristiana.

Esta civilización que se distinguió por su forma de gobierno basada en la autocracia, es decir, donde todo el poder recae en una sola persona, a veces hasta con tintes divinos (¿en dónde ha visto esto Mirone?), se distinguió también por sus arraigadas costumbres y sus tendencias a la superstición.

Entre ellas, afirman los historiadores, estaría el origen del refrán “En martes, ni te cases ni te embarques”, debido a la relación que el origen de la palabra martes tiene con el dios de la guerra, Marte, y su tendencia hacia los conflictos, por lo que era considerado de mal augurio para iniciar proyectos importantes.

La superstición alcanzaba a las relaciones matrimoniales, que, en los tiempos de los emperadores romanos, recaían más que en un acto de amor, en una relación de crecimiento de poder entre familias.

Por eso es que se atribuye al refrán la advertencia de que algo puede salir mal si te casas o te embarcas en martes y es peor, si ese día cae en 13.

Pues todo este repaso le viene a la mente a Mirone, al ver cómo ayer martes 13, la diputada federal Andrea Chávez Treviño, se lanzó así, como un ícaro volando hacia el sol, al solicitar licencia temporal a la titularidad de la Secretaría de Comunicación, Difusión y Propaganda del CEN de Morena.

Chávez Treviño refiere que lo suyo es un acto que nace “Por congruencia personal, por respeto a nuestra militancia digna y crítica, por amor a la Cuarta Transformación y para hacer las cosas bien”.

En un acto de humildad pura, la juarense dice que tomó la decisión de dejar el cargo “por el que fui electa unánimemente tras ser la consejera nacional más votada del país”.

En otras palabras, se llevará su popularidad como la diputada consentida de Andrés Manuel López Obrador, para apoyar a su padrino Adán Augusto López, quien suspira por suceder al presidente de la República.

Dice Andreíta que cuando la etapa de definiciones concluya, regresará a su encargo, para “aportar nuestro granito de arena en la victoria de 2024”.

Específicamente en su carta de licencia, Chávez dice que va a “participar de manera activa en el proceso de profundización y continuidad de la Cuarta Transformación de la vida pública nacional en la Coordinación de los Comités en Defensa de la Transformación”, lo que quiso decir Andrea es… ¿qué dijo?

Bueno, el caso es que la diputada dice que al no encontrarse lo anterior dentro de los estatutos e instrumentos normativos internos de Morena y debido a que los militantes merecen una dirigencia imparcial, neutral y objetiva, es que deja el cargo, temporalmente, dos mesesillos.

Era más fácil si hubiera escrito que se sale, pero para meterse a la grilla de lleno, pero prefirió hacerlo a la usanza de los políticos de la vieja guardia, mientras más enredado el mensaje, mejor.

Todo esto ocurrió un martes 13, a las 8:02 de la mañana, según el oficio que presumió Andrea en sus redes sociales, dirigido al doctor Alfonso Durazo Montaño, presidente del Consejo Nacional de Morena y lo dijo asegurando que serán “un ejemplo de responsabilidad, madurez y unidad”. Sabrá Dios lo que habrá querido decir.