El hecho de que niñas, niños y adolescentes estén terminando con sus vidas, indica que existe una falta de atención tanto en sus hogares, como en el ámbito educativo, ya que no estamos visibilizando este tipo de problemas que llevan a una persona a terminar con su vida, dijo la diputada priista Ivón Salazar Morales.
Ante este fenomeno social, la legisladora presentó una iniciativa para reformar diversos ordenamientos del estado para establecer un diagnóstico semestral sobre la situación de salud mental y suicidio infantil en las instituciones de educación básica del Estado.
Señaló de acuerdo adatos de la Encuesta Nacional de Salud (Ensanut) en 2021 se registraron 8 mil 351 fallecimientos por lesiones autoinfligidas en el país, lo que representa una tasa de suicidio de 6.5 por cada 100 mil habitantes.
Además se estima que los hombres de 15 a 29 años son el grupo con más riesgo, ya que ocurren 16.2 suicidios por cada 100 mil hombres entre estas edades.
En ese rango estadístico, Chihuahua ocupa el primer lugar con el 26.4 por cada 100 mil jóvenes, seguido de Yucatán y Campeche.
La legisladora expuso que de enero del 2021 a marzo del 2023 se contabilizaron 60 suicidios de niños y adolescentes varones menores de 17 años, y de 35 niñas y adolescentes, según cifras de la Fiscalía General del Estado.
En la ciudad capital, el registro fue de 16 víctimas, de las cuales 11 fueron varones y 5 mujeres. El segundo lugar lo tuvo Ciudad Juárez, con 9 varones y 6 mujeres, le siguen los municipios de Belleza, Parral y Guachochi.
Resaltó que es importante reconocer que existe un problema serio, ya que va más allá de defunciones, porque se trata de un fenómeno cuya raíz recorre varios problemas que se originan desde el núcleo de la sociedad.
El dato sobre el fenómeno del suicidio infantil y juvenil “es alarmante”, señaló la legisladora.
En el periodo de referencia, se presentaron factores que agudizan la situación derivado de los estragos de la pandemia Covid-19 tales como: trastornos psicológicos del sueño, estrés, ansiedad y depresión, dijo.
Aunado a eso, también incide la situación que se viva dentro del hogar; la violencia familiar que continúa permeando en la sociedad chihuahuense, el bajo estatus económico, maltrato físico o abuso sexual.
Otro factor que afloró en años recientes, agregó la legisladora, fue la falta de apoyo social, el acoso (bullying/ ciberbullying), bajo nivel educativo de los padres, la amplia cobertura sobre el suicidio en periódicos y televisión, el acceso a redes sociales y los retos virales, entre otros.
“Estoy convencida de que lo que no se mide, no se mejora, por ello es que instamos a las autoridades competentes a elaborar de manera periódica un diagnóstico”, concluyó.