Al cumplirse hoy siete meses del asesinato de dos jesuitas, un guía turístico y un deportista en Cerocahui, municipio de Urique, la Compañía de Jesús en México pidió al nuevo fiscal estatal, César Jáuregui detener la violencia en la zona.
“Han pasado siete meses desde los asesinatos de nuestros hermanos Javier y Joaquín, junto a Pedro Palma y Paul Berrelleza, y la impunidad continúa, sin que se haya detenido al perpetrador y sin que la situación de la región se haya modificado sustancialmente” lamentaron los jesuitas en un comunicado signado en Ciudad de México, en donde hoy celebrarán una misa en honor de quienes fueron asesinados a sangre fría por el líder criminal llamado “El chueco “.
“Hacemos un llamado para que el fiscal recién nombrado en Chihuahua y las autoridades de los diferentes niveles de gobierno, detengan la alarmante situación de violencia que aqueja a la Sierra Tarahumara y que hemos señalado durante estos meses”, resaltaron.
La Compañía de Jesús en México, agregaron, se encuentra preocupada por no contar con resultados sustanciales en la investigación y, principalmente, por la violencia que sigue azotando a la Sierra Tarahumara, ya que, al no haber justicia para los jesuitas y la comunidad de Cerocahui, el miedo impera en las y los pobladores.
“Los jesuitas de México seguiremos apostando por la memoria, denunciando la falta de justicia, pero también, anunciando con esperanza las alternativas a la violencia deshumanizante, a través de nuestras obras pastorales, educativas y sociales”, se pronunciaron los integrantes de Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús.