La gobernadora encabezó anoche la ceremonia en la que rindieron protesta más de 300 juezas y jueces; llamó a preservar la independencia y reconoció la trayectoria de Myriam Hernández
El relevo judicial en Chihuahua estuvo acompañado de un mensaje constante de la gobernadora Maru Campos: la justicia debe mantenerse lejos de la política.
Desde el estrado del Centro de Exposiciones y Convenciones ExpoChihuahua, la mandataria reiteró una y otra vez la necesidad de que los nuevos juzgadores actúen con independencia.
“Les hago un llamado para que, aún con este cambio de paradigma, seamos capaces de mantenernos firmes en la separación de poderes, en la independencia del Poder Judicial, y en lo más sustantivo, que es la impartición de justicia para los chihuahuenses”, expresó Campos en su discurso.
Chihuahua siempre ha marcado la diferencia
Durante su intervención, la gobernadora insistió en que la entidad se distingue por la defensa histórica de las libertades y la democracia. “Chihuahua siempre ha marcado la diferencia, siempre hemos sabido defender las libertades y la democracia”, subrayó, al tiempo que pidió a los recién nombrados jueces y magistrados conducirse con imparcialidad y voluntad de servicio.
El mensaje fue dirigido a los 30 magistrados del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), 5 magistrados del Tribunal de Disciplina Judicial y 270 juezas y jueces de primera instancia que rindieron protesta. Campos destacó que, más allá de la renovación de cargos, lo que está en juego es la confianza ciudadana en los tribunales.
Reconocimiento y transición
La mandataria aprovechó para reconocer la labor de la magistrada presidenta saliente, Myriam Hernández Acosta, así como de los juristas que concluyen su ciclo.
“Hoy rendimos homenaje a quienes sirvieron con equidad y neutralidad a Chihuahua, y damos la bienvenida a una nueva etapa que debe sostenerse en esos mismos principios”, dijo.
En la misma sesión solemne, Marcela Herrera asumió la presidencia del TSJ. En su mensaje, aseguró que se conducirá con responsabilidad, integridad e inclusión, y que su equipo será garante de los derechos fundamentales.
El discurso reiterativo de Campos fue: un llamado a blindar la justicia de intereses políticos y a preservar la separación de poderes en un momento de reacomodo institucional.
